Dani Pendín, jugador y capitán del Castellón, declaró hoy, ante la difícil situación que vive el club como colista de Segunda División, que los jugadores "no estamos valorando la institución en la que estamos". Pendín se ha convertido en la voz más crítica de la plantilla del Castellón, especialmente, tras la derrota cosechada en El Alcorza ante el Huesca. "Estamos en un equipo que es para valorar y todos nos estamos jugando mucho", comentó. Además, del futuro del fútbol en la ciudad de Castellón y del propio club, los jugadores castellonenses, según Pendín, también tienen en su mano el porvenir de sus carreras futbolísticas. "El fútbol da muchas alegrías y también penas. Gran parte de este equipo es joven y se están jugando su futuro, es importante que lo sepan también", avisó el capitán del Castellón. El veterano futbolista de la entidad castellonense afronta la realidad y muestra su lado más explícito. "Los futbolistas siempre tenemos excusas, cuando no es por una cosa es por otra", a la vez que reconoció que "la culpa es nuestra". Una vez llegado el periodo navideño y con los jugadores de vacaciones, Pendín advirtió a sus compañeros de que "ya somos mayorcitos todos, tenemos siete días para reflexionar y para pensar en lo que estamos haciendo". La derrota ante el Huesca dolió en el seno del Castellón, ya no tanto por el resultado y si por la imagen ofrecida, por lo que considera que "no podemos volver a bajar los brazos, no se puede volver a repetir", destacó un Pendín, que también trató de arrojar algo de luz a la oscuridad que se ciñe sobre el futuro del equipo. "Hay que luchar hasta el final, está complicado pero queda mucha Liga por delante, no podemos rendirnos", concluyó.