AL DEGÜELLO. "El Castellón llegó a El Alcoraz como un enfermo en estado grave y salió herido de muerte, por no decir cadáver. Se le vio como lo que es, colista. Un conjunto sin alma ni capacidad de respuesta", quedaba reflejado, por ejemplo, en el Diario del Alto Aragón.

OTRA RACHA QUE CRECE. El Castellón, desde el 2000, es incapaz de ganar a domicilio el último partido de un año natural que disputa a domicilio. En aquella oportunidad, los albinegros vencieron en el feudo del Barcelona B (0-2).

EL NUMANCIA. El próximo rival del Castellón, el primero del 2010 (a las cuatro de la tarde del 2 de enero en Castalia, por Canal+ Liga y Gol TV), espera recuperar, durante este parón navideño, al lateral derecho Felipe Guréndez y al mediocentro Joseba Garmendia, por quien el club albinegro preguntó el pasado verano.

ESPÍAS EN HUESCA. A pesar de la mala clasificación de los dos equipos, El Alcoraz estuvo poblado de ojeadores. Entre ellos, de varios clubs de Primera División, como el Villarreal y el Osasuna (este, para seguir las evoluciones del cedido Nico Medina). De la propia categoría de plata, había espías del Betis y el Gimnàstic (próximos rivales de los oscenses), así como del Salamanca, a quien el Castellón rendirá visita el 10 de enero (17.00 horas).