Jordi Vinyals le dijo ayer definitivamente sí quiero al Castellón. Como indicó Mediterráneo en su edición del pasado miércoles 23, el técnico de Cardedeu era el mejor situado para dirigir desde el banquillo el nuevo proyecto en Segunda División B en la temporada 2010/11, en la que se parte, de forma inevitable, con el objetivo de retornar a Segunda División A de inmediato.

Tras varios días de negociaciones, en las que apenas hubo discrepancias, el director deportivo albinegro, Dani Barroso, y el agente del entrenador, Mágico Díaz, llegaron ayer a un acuerdo definitivo por el cual el preparador catalán se compromete con el Castellón por la próxima temporada, con una opción de prorrogar un año más la vinculación contractual en caso de ascenso a la categoría de plata.

Vinyals llega al Castellón después de haber dirigido la pasada campaña a L’Hospitalet, equipo con el que ascendió de Tercera a Segunda División B. El técnico catalán de 47 años ha dirigido, además, al Villarreal B, Palamós, Gimnàstic de Tarragona -con el que ascendió de 2ª B a 2ª A-, Algeciras, Terrassa, Jaén, Castelldefels y el mencionado L’Hospitalet.

En su etapa como futbolista, militó en equipos de la entidad del Barcelona, Oviedo, Betis, Villarreal, el propio Castellón, con el que ascendió a Primera División, Sabadell, Terrassa y Figueres.

COn su equipo // El proyecto que la dirección deportiva le ha ofrecido a Vinyals ha sido determinante para que el preparador de Cardedeu se enrole en la nave orellut. A su vez, el nuevo entrenador del Castellón guarda un grato recuerdo de su estancia como jugador en la capital de La Plana, ya que logró el ascenso a la máxima categoría en la temporada 1988/89 y lo hizo como campeón de Segunda A de la mano del equipo entrenado por Luiche.

La idea del club, pese a que no se ha confirmado oficialmente, es presentar a Jordi Vinyals el próximo lunes en las dependencias de Castalia. El técnico llegará bien arropado por gente de su confianza. Sin ir más lejos, Arnau Navarro será el nuevo preparador físico del primer equipo, mientras que Mikel Touzón hará las veces de segundo entrenador, preparador de porteros y se encargará de la edición de los informes de los rivales de la categoría.

A Vinyals le gusta tener muy bien controlados a todos sus rivales, ya que es consciente de que la Segunda División B es una categoría poco dada a las florituras. Los estadios, por norma general, son mucho más pequeños que Castalia y los contrincantes tienen sus propias estrategias. Es por ello que el tener un control exahustivo de sus oponentes es fundamental para el preparador.

A sus 46 años, Jordi Vinyals tendrá una nueva oportunidad de demostrar, en un club con la solera del Castellón, que está perfectamente capacitado para llevar las riendas de un proyecto tan exigente como el albinegro y devolverlo a Segunda División A, como ya hizo en su día con el Gimnàstic de Tarragona. H