El lateral catalán Joan Oriol podría haberse ido de vacaciones mucho antes de que acabara la Liga en Segunda División A. El club amarillo le dio permiso para que descansara antes y se incorporara al trabajo el 12 de julio con la primera plantilla, pero no quiso: “Los amigos me dijeron que estaba un poco tonto, pero siempre he dicho que cuando empiezo en un sitio tengo que acabar ahí”. Un ejemplo de compromiso deportivo.

Por su parte, Mario Gaspar empezó unas vacaciones ‘atípicas’. El lateral sufrió el pasado 21 de abril un esguince de grado 3 que le obligó a despedirse de la temporada. Ahora está siguiendo un plan específico para volver al cien por cien en la pretemporada con el Villarreal: “Se me está haciendo larga la recuperación, pero voy todos los días a rehabilitación y estaré bien para comenzar a trabajar con el primer equipo”.