El Parlamento sudafricano citará mañana a los principales responsables de la Federación Sudafricana de Fútbol (SAFA) para que expliquen detalladamente qué harán con los mil millones de Rand (unos cien millones de euros) que les ha dado la FIFA y para asegurarse de que no se pierden por el camino.

"Lo que queremos de la SAFA es desarrollo. Estos equipos (de categorías inferiores) tienen que ser la cantera de la selección nacional. La SAFA tiene que ser clara cuando hable con nosotros sobre estas cosas", dijo Butana Komphela, presidente del comité de deportes de la Asamblea Nacional, a la prensa local.

En principio, la SAFA anunció a través de su presidente, Kirsten Nematandani, que el dinero que donó la FIFA tras el Mundial estaría destinado al desarrollo del fútbol base, pero el Parlamento también quiere conocer de primera mano todo lo referente a las primas, para evitar que parte de ese dinero sea mal empleado o desaparezca.

"Deben enseñarnos su plan, cómo este dinero beneficiará a toda Sudáfrica", añadió Komphela. El asunto de las primas es especialmente delicado después de que la prensa local denunciase que los principales administradores del fútbol sudafricano se habían embolsado millones de Rand por el hecho de haber conseguido llevar el Mundial a Sudáfrica.

El presidente ejecutivo de la SAFA, Leslie Sedibe, dijo a principios de mes que la discusión sobre las primas no tendría lugar hasta que el Mundial hubiese finalizado, mientras que la prensa local denunció en su momento que la antigua administración de la SAFA había decidido repartirse el diez por ciento de la donación de la FIFA.