El Valencia dejó resuelto su pase a los octavos de final, pese a que todavía queda la vuelta en Mestalla, después de vencer con holgura al Logroñés entrenado por el nulense Sergio Pellicer (0-3).

Los locales aguantaron la primera mitad, en parte porque los che acusaron una clara falta de motivación en Las Gaunas. Sin embargo, el doblete de Aduriz (ambos tantos servidos por un genial Mata), en el primer cuarto de hora de la reanudación (minutos 54 y 59), terminó con la ilusión riojana. Vicente, por si acaso, firmó el 0-3, ya en el minuto 79. H