El monocasco valenciano de Enrique Rubio sentenció ayer la segunda jornada en aguas de Castellón. La experiencia del patrón Nacho Braqueais y la exactitud de cálculo de Elvira Llabrés fueron fundamentales para que la embarcación Cuadernos Rubio cerrase el sábado con una actuación perfecta que les hace rozar el codiciado Trofeo Costa Azahar.

En la primera manga del día, Cuadernos Rubio, patroneado por el ganador de una America’s Cup, Nacho Braquehais, decidió ir desde el mismo instante de la salida por el medio del campo de regatas. Por esa misma zona, el barco del Real Club Náutico de Valencia navegaba con buen ángulo y excelente velocidad en el primer tramo de ceñida.

Tomaba la boya de barlovento en tercera posición, por detrás de Porrón e Ithaca, primero y segundo respectivamente. Recién iniciado el segundo tramo del recorrido, el Cuadernos Rubio era el primer barco que decidía trasluchar, buscando la presión al lado derecho del campo de regatas. El First 45 DK del armador Enrique Rubio acertaba por ese costado y obtenía su recompensa. Rodeaba la boya de sotavento en segunda posición y conseguía recortarle distancia al líder Porrón.

Cuadernos Rubio se dirigió a la derecha del campo de regatas en la segunda ceñida, donde mantenía un par de lances con el Ithaca de Calpe, saliendo airoso de ambos para firmar la primera victoria del día, con un segundo para Ithaca y un tercero para Porrón.

En la segunda manga del sábado Braquehais y los suyos buscaron la esquina derecha del campo de regatas en la primera ceñida, llegando en la segunda posición real a la baliza de barlovento, delante Porrón y detrás Ithaca. Cuadernos Rubio mantuvo la calma y aseguró la segunda victoria del día, para adjudicarse luego la tercera, gracias a una salida insore, favorecido en 10 grados y echando al Porrón, que estaba a barlovento. Ambos veleros mantuvieron una guerra de cruces pero fue Cuadernos Rubio quien finalmente sumó a la general tres primeros. H