Tras el sentido minuto de silencio en memoria de Rodri, se inicio un muy interesante y emocionante partido entre dos equipos que siempre deparan, al enfrentarse, grandes partidos. Esta vez no iba a ser menos, pese a que la primera mitad transcurrió sin goles, con mucho juego de elaboración, acierto de ambas defensas y teniendo como actores principales a ambos guardametas. El segundo acto ya comenzó movido, sobre todo en el aspecto arbitral, con varias decisiones.

Pepe vió la segunda amarilla al primer minuto, circunstancia que aprovechó muy bien José María en el minuto 22, adelantando a los suyos, jugando en superioridad numérica. Garban devolvió las tablas nueve minutos después convirtiendo el penalty y expulsión provocado por Cristian al salvar con la mano un balón reatado por Lluis que ya se colaba.

Los dos equipos estaban decididos a llevarse el triunfo y el peligro rondaba ambas metas. De nuevo Garban y también de desde los seis metros adelantó a los locales a falta de cinco para el final. Esta vez el brazo de Ángel Miguel desvió un lanzamiento local dentro del área.

Los de Alzira siguieron con su actitud de no darse nunca por vencidos optaron por jugar de cinco y asediar la meta local. Y obtuvieron recompensa. A falta de tres para el final, Francisco Javier batió a Xavi y enfilaba el encuentro hacia un más que probable empate definitivo.

El desenlace llegó en el último minuto cuando Anás casi desde el corner marcó, finalizando una buena jugada de ataque de cinco local ya no quedó tiempo para nada más y los rojinegros se llevaron los tres puntos. H