Que José Manuel García Osuna y Antonio Blasco no lo van a poner fácil para que el Castellón tenga una salida, es algo tan notorio y conocido por todos que no hace falta comentarlo. Ahora bien, las pretensiones de las dos personas que forman parte del núcleo duro -nunca mejor dicho- de Castellnou2005 (CS9) va, incluso, más allá. Tanto, que tienen la intención de colocar una cláusula que todo aquel que quiera comprar el club (utopía) o, al menos, hacerse cargo de su gestión (posibilidad) debe cumplir. Una cláusula que bien podría denominarse la de no agresión.

SEÑaLADOS // Esa condición sine qua non, esa exigencia por la cual no soltará el Castellón, alude a que no se podrá demandar judicialmente a Castellnou2005 por las irregularidades cometidas al frente de la SAD, ya elevadas, desde la semana pasada, a presunto delito, después de que Sentimiento Albinegro (Asociación de Pequeños Accionistas y/o Abonados del Castellón) denunciara públicamente, el miércoles, las empresas relacionadas con Osuna y Blasco -e, incluso, también con Jesús Jiménez- que, siempre con la presunción de inocencia por delante, facturaron al club por servicios que no quedan demasiado claros y por un valor ciertamente alto. Facturas que, en vez de otras muchas, sí están pagadas.

EL BLINDAJE // Se trata de una cláusula que ya ha estado presente en las negociaciones de los últimos tiempos, tanto con Fernando Miralles el verano pasado como con Paco Chinchilla en enero/febrero, cuando el de Figueroles ya anunció su intención de marcharse. Entonces, el exjugador albinegro --ahora asesor fiscal y promotor-- habría aceptado, para sacar a la SAD de su estado actual de absoluto abandono e inacción.

En este sentido, Chinchilla es el único que se ha posicionado para hacerse con las riendas del club, ahora que Jiménez y Miralles parecen completamente decididos a salir de la escena. El exfutbolista guarda silencio, pero ya han vuelto a retomarse los contactos, principalmente con Osuna, aunque todo queda a expensas de que Castellnou2005 reciba las pertinente renuncias de los anteriores, con lo que el contrato de cesión de acciones quedaría anulado y, en consecuencia, el club volvería a ser 100% de CS9.

A partir de ese mismo momento, volverá a comenzar la partida de ajedrez en una situación y condiciones prácticamente calcadas a las de junio del año pasado.

El caso es que la situación, respecto a Osuna y Blasco, es muy peliaguda. Por un lado, se trata de sacar a la luz, con pruebas (como ha hecho Sentimiento Albinegro), todo lo mucho que Castellnou2005 ha hecho mal en su etapa a los mandos del Castellón, especialmente los últimos. Pero, por otro, el entorno es consciente de que tampoco se les puede presionar en exceso para, volviendo a retomar otro término ajedrecístico, no se enroque y ponga todavía más difícil, si cabe, desprenderse del dominio de la SAD. Es, por tanto, un difícil equilibrio.

UN MES // En todo caso, apenas queda un mes para que el desenlace. Treinta y un días en el que el albinegrismo tiene que bajar a las trincheras para librar la batalla más importante en un club que espera, en julio, llegar a la simbólica cifra de 90 años de vida. Todo depende, desde luego, de Osuna y Blasco, los culpables de tener como rehén al Castellón y con el tiempo jugando a su favor. H