La Federación Española de Fútbol (RFEF) ha decidido llevarse a China la disputa de la Supercopa de España a partir del año que viene. La federación ha firmado con la empresa United Vansen International Sport un acuerdo marco de intenciones por el que cinco de las siete finales a partir del 2013 se jugarán en China. Aunque se habla de unos beneficios de casi 40 millones de euros para la RFEF, Jorge Pérez, secretario general de la organización federativa, ha asegurado a EL PERIÓDICO que "el tema económico no está concretado".

Todo está supeditado, además, a que lo apruebe la asamblea del fútbol español, algo que en principio no supondrá ningún problema para que la iniciativa salga adelante. Se había planteado incluso la posibilidad de que la próxima final, entre el Barça y el Real Madrid, se llevara ya a territorio chino, pero no ha sido posible un arreglo en cuanto a las fechas disponibles.