El Espanyol de Barcelona se llevó el trofeo de campeón de la Copa del Rey juvenil que se disputó en el San Fernando de Burriana. La alegría de los catalanes y la tristeza de los malaguistas pudo verse durante la entrega de medallas en el palco del campo, por parte del presidente de la FFCV, Vicente Muñoz, que también estaba acompañado por autoridades de Burriana, del Málaga y también del Espanyol.

Durante el primer tiempo destacaron las ocasiones malaguistas, aunque el Espanyol también provocaba alguna ocasión peligrosa. El malaguista Pedro tuvo en varias ocasiones la oportunidad de adelantar a su equipo en el marcador, pero el guardameta Germán no dejó que el balón se colara en su portería. Incluso el Málaga disparó al palo en su oportunidad más peligrosa con un disparo de Rafa.

LLEGA EL GOL // En el comienzo de la segunda parte tuvo lugar el único gol del encuentro, gracias a una jugada por la banda derecha que acabaría rematando Héctor, el capitán del Espanyol. Los catalanes aún tuvieron otra gran ocasión con un penalti, pero el disparo de Canadell se marchó por encima de la portería. Los malaguistas no se dieron por vencidos y continuaron creando ocasiones de gol, pero sin conseguir el tanto que les hacía falta para igualar a su rival.

Con el pitido final del colegiado la alegría estalló en la expedición espanyolista, que celebró el título copero por todo lo alto sobre el césped del San Fernando de Burriana bajo la atenta mirada del numeroso público que se acercó para disfrutar del mejor fútbol juvenil en España. Un partido de alto nivel en el que ganó el más efectivo cara al gol. H