La emoción y los goles presidieron el encuentro disputado por el Càlig en el feudo del San Lorenzo, en el que los visitantes se llevaron los tres puntos en un final de auténtico infarto. Un partido de ida y vuelta, lleno de alternativas en el marcador, en el que cualquiera de los dos equipos pudo haberse llevado la victoria.

Las reducidas dimensiones del terreno de juego facilitaban la labor a los atacantes de ambas escuadras, aunque no fue hasta poco antes de cumplirse la primera media hora de juego cuando se movió el marcador.

El visitante Tallo anotó la primera de las tres dianas que consiguió ayer y mantuvo un duelo de arietes con el local Triviño, que por dos veces igualó un marcador adverso. El segundo tanto de Triviño llegó ya en la segunda mitad y las tablas se mantuvieron hasta que el choque entró en la decisiva recta final.

penalti // Fue entonces cuando, a falta de cinco minutos para el final del encuentro, Tallo completó su hat-trick al materializar una pena máxima cometida sobre él mismo. A pesar de este nuevo golpe, el San Lorenzo no dio su brazo a torcer y ya en el tiempo de descuento empataba por tercera vez en un nuevo contragolpe, esta vez por medio de Valero.

Parecía que el resultado ya era definitivo, pero el Càlig todavía tuvo tiempo para forzar un saque de esquina que le permitió cerrar el encuentro tal como lo había iniciado, aprovechando una jugada ensayada para batir el marco contrario y adelantarse por última y definitiva vez. Los de Jordi Cardona suman así su primera victoria ante un San Lorenzo que continúa sin estrenar su casillero de puntos en esta temporada. H