El italiano Valentino Rossi, que en un momento de su declaración ante los periodistas reconoció sentir envidia de la situación en la que se encuentra Marc Márquez, que se podría proclamar matemáticamente campeón del mundo en Australia, coincidió con éste en que "la cuestión es ganarlo, y dónde se haga no importa".

"Si gana el Mundial, en el año de su debut, será más mérito de él que de Honda. Si uno gana en el año de su primer año no se le puede poner ninguna pega", afirmó Rossi.

"Márquez ha demostrado muchas veces que no le pesa la presión ni lo que pueda suponer jugarse un Mundial y tiene una gran ventaja y no es un título que se decide en la última carrera, así que puede actuar como viene haciéndolo hasta ahora", reconoció el italiano.

El circuito de Phillip Island es especial por muchos motivos, su emplazamiento sin parangón y su complicado trazado, y para Rossi por el hecho de que aquí sentenció sus títulos de 2001 (500 c.c.) y 2004. "Probablemente son los campeonatos más bonitos de mi carrera, es un sitio especial para ganar el Mundial", admitió.

No obstante, centrado en su trayectoria, Valentino Rossi se mostró esperanzado: "Con la Yamaha podamos estar cerca aquí, pues hay 'curvones' largos y podemos ser competitivos", indicó.

Sin olvidar su siempre carismática forma de ser, en un momento determinado Valentino Rossi comentó entre sonrisas que "lo único seguro es que no ganará Stoner, después de hacerlo seis años seguidos".

"Será interesante, porque aquí Stoner ha marcado la diferencia los últimos años y, sin él, el hombre a batir es Jorge Lorenzo, que es el que mejores resultados ha hecho, pero habrá que ver cómo va Marc", aseguró Rossi.