El Real Madrid, sin jugar a todo gas, avasalló a un moribundo Real Betis, al que no dio opción en ningún momento, y firmó una goleada (0-5) que le lleva a compartir momentáneamente la cabeza de la clasificación, igualado a puntos (50) con Barcelona y Atlético de Madrid.

Tardó un poco en aparecer Cristiano Ronaldo, justo diez minutos, y en la primera ocasión en que llegó a la portería rival, envió un balonazo a una escuadra de la portería defendida por Andersen desde unos 30 metros. El noruego hizo la estatua, no podría haber reaccionado mejor ante un misil marca de la casa del portugués.

Fue el equipo de Ancelotti el que llevó siempre la iniciativa, ante un Betis con más energía que en otros partidos, pero también temeroso del potencial de su adversario en el día de ayer.

En el minuto 24, una falta al borde del área bética la convirtió en gol Bale con un disparo muy colocado que superó la barrera y entró en la portería local. El 0-2 dejó al Betis aún más tocado. Al filo del descanso fue Benzema quien batió a un desafortunado Andersen. Modric recuperó el balón y se lo pasó al galo, que firmó el 0-3 con un tiro dentro del área.

El Real Madrid jugó en el primer periodo al ritmo impuesto por Modric y Xabi Alonso.

Ya en el segundo acto, Di María, en el minuto 62, anotó el 0-4 con un potente lanzamiento raso desde fuera del área. El Madrid estaba lanzado y fue Morata, en posible fuera de juego, quien rubricó la manita en el Villamarín aprovechándose de un mal remate de chilena de Cristiano.

Juan Carlos Garrido, técnico bético, fue pitado por la afición verdiblanca y su puesto en el equipo pende de un hilo muy fino. H