La protestas ante la Liga de Fútbol Profesional (LFP) de los clubs afectados por el cambio horario de la 26ª jornada solicitado por el Villarreal no se hicieron esperar. Betis --rival de los amarillos el 2 de marzo--, Rayo y Valencia --los dos que pasarán de jugar ese día a las 12.00 a hacerlo a las 21.00-- expusieron a la LFP los motivos por el que creen que se sientes perjudicados.
El Betis emitió un comunicado en el que lamentó “la decisión unilateral de la LFP” que resta horas de descanso a un equipo que regresará de Kazán (centro de Rusia) en la tarde del viernes 28 de febrero. El Valencia, por su parte, denuncia el perjuicio para “cientos de aficionados” que tenían confirmada su presencia en Vallecas. Su presidente, Salvo, amenaza con no asistir a la reunión de la LFP que se celebrará en Valencia el 25 de este mes si no hay rectificación.
Por último, el presidente del Rayo, Martín Presa, mostró su disconformidad y solicitó a la LFP que mantenga su partido a las 12.00 aunque tengan que coincidir dos encuentros de Primera División a esa hora. H
