El Amics exhibe sus mejores armas para meterse en ‘semis’

El sueño de las semifinales ya es una realidad. El Amics del Bàsquet Castelló dio un nuevo paso hacia al ascenso a LEB Oro clasificándose para la penúltima ronda del play-off tras desarbolar a El Bulevar Ávila en el partido de desempate. Con un Roger Archilés descomunal --fue el jugador más valorado del equipo (19), los mismos que Atoyebi-- y un Faner brillante en la dirección y en las recuperaciones --interceptó cuatro balones--, los castellonenses dejaron constancia de su superioridad y ahora buscarán acceder a la final ante el Palma Air Europa.

Conscientes de la trascendencia del partido y con la experiencia de lo acontecido en el primer choque de la serie, los pupilos de Toni Ten salieron con una motivación extra, arrollando a los abulenses en el primer cuarto. Tardaron un minuto y medio en anotar --fue la primera canasta del partido--, pero a partir de ese instante lo bordaron, llegando al final del periodo con una ventaja de 14 puntos (30-16).

Y en el excelente juego intervinieron varios factores, destacando una espectacular defensa al hombre --cinco recuperaciones (al final 17) y tres tapones (terminaron con nueve)-- y un ataque demoledor, con un 80% en tiros de dos y 4 de 7 en triples (57%).

Los cimientos hacia la victoria y la consiguiente clasificación para semifinales se habían colocado, pero había que confirmarlos en los otros tres cuartos. Y costó más de lo previsto, tras lo visto en los primeros 10 minutos, porque los visitantes sacaron su orgullo y los castellonenses bajaron el ritmo. Abusaron del tiro exterior en el arranque, sin acierto, lo que provocó la recuperación del rival, que llegó a situarse a solo cinco puntos (44-39) tras un parcial de 0-7. Faltaba poco más de un minuto para el descanso y el Amics lo arregló para marcharse a los vestuarios con 48-39.

la sentencia // Había que seguir peleando y esto es lo que hicieron los castellonenses, aunque en el tercer cuarto les costó coger el ritmo --las diferencias oscilaban los ocho y nueve puntos-- y solo el arreón final, en los últimos tres minutos, dejó sentenciado el encuentro, pasándose del 63-53 al 72-53 (9-0). El pase a semifinales era casi una realidad, pero no había que bajar el pistón. Se llegó a los 20 puntos de ventaja (77-57) y el único objetivo era controlar la situación. Al final, 83-68. H