Neymar, el hombre encargado de guiar a Brasil hacia su sexta Copa del Mundo y cerrar la herida del Maracanazo más de 60 años después, acudió al rescate de la canarinha en un estreno complicado por los apuros provocados por Croacia, que respondió a lo esperado y planteó un exigente debut de los anfitriones (3-1).

La estrella del Barça, tras un año trufado de problemas (futbolísticos y extrafutbolísticos), sabe que está en el momento y escenarios apropiados. Ney se echó a sus espaldas a la seleçao, espesa y superada en muchos tramos del partido inaugural por los Modric, Rakitic y compañía. Una internada por la izquierda de Olic mostró de nuevo la permeabilidad de Dani Alves y la sucesión de fallos y semifallos terminó con Marcelo impulsando el balón hacia la red de Julio Cesar (min. 11).

Croacia dominaba el balón y el encuentro ante un rival en el que sus jugadores más desequilibrantes, los de arriba, permanecían desconectados. Así lo demostró el propio Neymar, cuando sacó a pasear esa otra faceta suya de jugador bronco: tuvo el honor de ver la primera tarjeta amarilla del Mundial, por un golpe a Modric.

Pasaban los minutos y la torcida no lo veía nada claro. Hasta que una jugada marca de la casa del azulgrana, entrando por el centro y con total libertad de movimientos, restableció la igualdad al filo de la media hora. El 10 de Brasil remató con la izquierda desde la frontal y, con Pletikosa algo adelantado y falto de reflejos, el balón terminó entrando en la portería con suspense, después de tocar antes el poste izquierdo.

El tramo final del primer tiempo vio una pentacampeona ya netamente superior a los balcánicos, que respiraron aliviados con la llegada del descanso.

LA JUGADA CON MAYÚSCULAS // Al regreso del vestuario, Croacia volvía a manejarse con soltura, ante un adversario que no estaba nada cómodo sobre el césped del Corinthians Arena de Sao Paulo.

A 20 minutos del final, Brasil no podía con Croacia, pero el árbitro, el japonés Yuichi Nishimura, tomó partido. Consideró punible un forcejeo entre Lovren y Fred en el área. De nada valieron las protestas de los arlequinados porque Neymar, pese a que ejecutó un lanzamiento mejorable, puso por delante a los locales.

Croacia no se descompuso y gozó de sus ocasiones para rescatar un punto. Pero cuando más cerca estuvo, al filo del minuto 90, llegó la sentencia de Oscar.

En definitiva, Brasil arranca ganando -como se esperaba-, aunque dejando un poso de dudas... pero con la certeza de que Neymar está en plan estelar. H