El Villarreal jugará mañana (19.00 horas) en Vallecas no solo con la baja de Bruno. Desgraciadamente, el capitán no es el único integrante de la enfermería del Submarino, que puede comparecer con media docena de ausencias por lesión.

Los amarillos ya afrontaban el primer asalto de la Copa del Rey frente al Barcelona sin Jokic, Adrián Marín ni Uche. La cuestión es que el 3-1 del Camp Nou ha dejado, además, una elevada factura por pagar, pues al margen del contratiempo del artanense (el capitán permanecerá al menos dos meses sin jugar por su rotura de peroné), es prácticamente imposible que recupere a Jonathan o Mario, los otros dos damnificados del encuentro.

SOLamente CON 16 // Debido a estas bajas, Marcelino García está obligado a reinventarse... y a reinventar al equipo. Otra vez. El técnico asturiano puede verse forzado a llevarse ya a Bailly, pese a que el joven central apenas habrá completado dos sesiones a sus órdenes y después de que el futbolista costamarfileño haya afirmado sentirse “un poco cansado”, después de tanto viaje una vez se hubiese proclamado campeón de la Copa de África. A priori, son solo 16 los disponibles.

Los amarillos se ejercitaron ayer por la tarde sin que Jonathan, Uche ni Mario trabajasen al mismo ritmo que sus compañeros. Un síntoma, a 48 horas del siguiente compromiso, que denota que su participación, en el encuentro frente al Rayo, es más una ilusión que la realidad.

El Submarino encara uno de los momentos cumbre de la temporada de nuevo acosado por las lesiones, puesto que la próxima semana retoma la Europa League desde los dieciseisavos de final. Antes, con todo, tratará de meter más presión a Valencia y Sevilla en la pelea por la Champions, zona de la que ahora está separado por solo tres puntos. H