El Amics consiguió su objetivo a las primeras de cambio. Los de Toni Ten viajaron a Alicante con la imperiosa necesidad de sumar al menos una victoria en el Centro de Tecnificación para mantenerse con vida en la eliminatoria de semifinales por el ascenso a LEB Oro y recuperar el factor cancha para decidir su pase en el Ciutat. Y como los campeones, los castellonenses no dieron opciones a un cuarto partido de infarto, a vida o muerte, y solventaron la papeleta a la primera. Mañana (18.00 horas), el Amics saltará de nuevo a la pista alicantina bien para sentenciar la eliminatoria y pasar a la final ante el CEBA Guadalajara --ayer redondeó el claro 3-0 ante el Zornotza-- o, en el peor de los casos, para dar paso a un todo o nada ante su afición, el día 19.

Los de Ten se salieron con la suya a pesar de un inicio que parecía vaticinar todo lo contrario. El Lucentum saltó dispuesto a reeditar su triunfo del primer encuentro de la serie y Edu Guillén tomó el mando de las operaciones, especialmente inspirado en posiciones cercanas al aro para disparar al Lucentum, que se aproximó al descanso con más de 10 puntos de ventaja. Un tiempo muerto de Toni Ten paró la racha local y enchufó al Amics, que redujo la desventaja a solo cinco puntos al descanso.

Esos últimos minutos del primer tiempo supusieron el mejor agente motivador para un Amics en el que Carles Marzo comenzó a hacer de las suyas con un triple de salida en el tercer cuarto. El base se echó a las espaldas al resto de sus compañeros y a hacerles creer firmemente en una victoria que comenzó a hacerse realidad cuando Bortolussi igualó el partido. El Amics ya no soltó el mando y fue imponiendo su ritmo y ahogando al Lucentum con un fenomenal trabajo defensivo que desembocó en el 59-68 final. H