Había planeado Xavi irse del Barça, de su casa, al volver del Mundial de Brasil. Pero Luis Enrique le convenció para que continuara una temporada más en el Camp Nou. Y justo en su último año, el capitán del Barça podría recoger tres trofeos (de momento la Liga es suya) para despedirse a lo grande. La conquista del título en el Calderón hizo derramar lágrimas en el rostro de Xavi, quien tiene previsto anunciar este jueves su marcha con destino a Catar para acabar allí sus últimos años como futbolista, además de formarse en la Academia Aspire.

Si no hay cambios de última hora, Xavi oficializará su salida el jueves, recibirá el homenaje que le está preparando el club el sábado en el Camp Nou para festejar la Liga y despedir a un futbolista único. No solo por su inmenso palmarés (23 títulos) sino porque ha marcado el estilo del Barça.