El Villarreal regresó al trabajo en la tarde de ayer, tras un duro viaje de regreso de tierras alemanas, aunque mitigado por la satisfacción del pase a los cuartos de final de la Europa League. Eso sí, los de Marcelino no se dejaron ver demasiado por la Ciudad Deportiva, donde solo saltaron al césped los jugadores que no fueron titulares en Leverkusen y otros, como Musacchio, que siguen recortando los periodos de recuperación de sus lesiones. Así, no será hasta hoy cuando el técnico evalúe el estado de sus jugadores para hacer frente al Barça.

Areola, descartado en el BayArena por un esguince de rodilla, siguió su proceso de recuperación en el vestuario, mientras que sí se vio vestido de corto a Leo Baptistao, visiblemente mejorado de la gripe que le impidió jugar el pasado jueves. Bakambu, por su parte, llegó a Vila-real presentando visibles síntomas de molestias en su tobillo izquierdo, que incluso le impedían calzarse normalmente las zapatillas. Hoy, Marcelino pasará revista para confeccionar la convocatoria destinada a poner en aprietos al líder de la Liga española. H