Pep Molins estaba orgulloso de que los atletas africanos entrenasen en las pistas de Sabadell que llevan su nombre. Hace cuatro años llegaron los primeros. "Fueron 10, pero era increíble. Cada vez que hacían una serie caía un récord de España". Al año siguiente se dobló la cifra, principalmente fondistas procedentes de Etiopía. Venían al Vallès para escapar de la época de lluvias. Al tercer año, la relación entre Molins y el grupo de africanos comenzó agrietarse. La razón no fue otra que la decisión de Jama Adem, detenido este lunes, de preparar también a Jordi Torrens, una promesa, ahora con 18 años, y que era pupilo de Molins, el antiguo entrenador de Carmen Valero.

Los deportistas africanos se hicieron famosos enseguida en Sabadell. Los 'runners' de la ciudad coincidían con ellos por los parques y por el cauce del río. Pero nadie podía seguirlos. "Se enfadaron porque hasta el año pasado usaban las instalaciones municipales de forma gratuita. Y no solo las pistas, si no el gimnasio y la piscina. Decidimos cobrarles una cifra simbólica, 30 euros, pero la iniciativa no le gustó a Adem", recuerda Molins.

Este año la cifra se incrementó y aumentó hasta los 30 atletas. "Hace unas semanas no solo comenzaron a llegar fondistas, de 800 hasta 10.000, si no también velocistas", explica Josep Maria Antentas, vicepresidente de la Federación Catalana de Atletismo. Los velocistas eran principalmente catarís. Por esta razón, Adem (ayudado habitualmente por su hermano) necesitó la colaboración de otros técnicos. Antentas había quedado citado por la mañana con Adem para hablar precisamente de los entrenamientos de sus atletas en Sabadell. Pero le avisaron de que los mossos estaban registrando el hotel Arrahona.

TRES SEMANAS EN SABADELL

Genzebe Dibaba llevaba tres semanas en Sabadell. Había renunciado a los últimos mítines con la excusa de que estaba lesionada en un pie, versión que había sorprendido a los dirigentes de la IAAF. El domingo llegaron sus dos hermanas. Volaron a Barcelona junto a Abbdi Bile, somalí como Adem y miembro de su staff técnico. En su etapa como atleta consiguió la medalla de oro en la prueba de 1.500 del Mundial de Roma de 1987.

Sin embargo, las constantes llegadas y salidas de atletas hacía muy complicado el seguimiento de los deportistas. Por esta razón, tras la actuación policial de este lunes, las autoridades antidopaje temen una espantada de los atletas que fueron sometidos a los controles. Varios atletas africanos se habían comprometido con la federación catalana para participar en el campeonato de Cataluña que se celebra a finales de mes en el estadio Serrahima de Barcelona. En el 2015 corrió Diababa quien celebró su triunfo dando una vuelta a la pista con una 'estelada'.