El nadador estadounidense Michael Phelps volvió a hacer historia al convertirse en el primero en conseguir asistir por quinta vez a los Juegos Olímpicos, que este año se van a disputar en Río de Janeiro. Phelps, el nadador que posee 22 medallas olímpicas (18 de ellas de oro), tuvo que luchar al máximo para conseguir la victoria en la final de los 200 metros mariposas del torneo preolímpico que se disputa en la piscina principal del Century Link Center, de Omaha (Nebraska) al completarse la cuarta jornada.

El atleta más condecorado en la historia del olimpismo superó en la final a Tom Shields al establecer un tiempo de 1.54.83 minutos después de liderar los primeros 50 metros, pero en la recta final fue su rival el que estuvo cerca de conseguir la victoria. Shields, de 24 años, también se aseguró el pase a Río al parar el reloj en 1.55.81, y se presenta como un serio candidato a conseguir la victoria en los 100 mariposa. Jack Conger ocupó el tercer lugar (1:56.45) y Gunnar Bentz entró cuarto (1:56:64). El protegido de Phelps al que también entrena, Chase Kalisz, que ya logró el pase a los Juegos Olímpicos en otra prueba, quedó quinto (1:56.64).

"Ha sido uno de los logros más difíciles de mi carrera", aseguró Phelps sobre su nueva clasificación olímpica, que eleva a cinco los Juegos en los que habrá participado: todos desde Sídney 2000, los únicos en lo que no logró subir al podio. Después, el brillante nadador, que este jueves cumple 31 años, ha forjado la mejor carrera olímpica de la historia con esas 22 medallas que puede incrementar en Río, donde pretende participar también en los 100 mariposa y los 200 estilos -si logra la más que probable clasificación- así como en alguno de los tres relevos.

UN DEPORTISTA RECONSTRUIDO

Tras anunciar su retirada en Londres 2012, Phelps ha vivido una auténtica carrera de obstáculos hasta su brillante regreso en Omaha. Regresó a las piscinas a principios del 2014, pero en septiembre de aquel año fue detenido por conducir ebrio (era reincidente) y la federación le sancionó con seis meses, impidiéndole participar en los Mundiales de Kazán del 2015. Tras un periodo de depresiones en que incluso flirteó con el suicidio, una larga estancia en un centro de desintoxicación le permitió reconstruirse. Su unión con Nicole Johnson, una antigua Miss California, y el nacimiento de su primer hijo, Boomer, el pasado mes de mayo, han acabado de forjar al nuevo Phelps.

"Río me permitirá acabar mi carrera a lo grande, como yo esperaba, y esto es muy importante para mí". aseguró el 'Expreso de Baltimore', otra vez en la cresta de la ola.