En la rueda de prensa de presentación del nuevo grupo inversor, dos de los miembros de la nueva directiva, Pablo Hernández y Ángel Dealbert, han declarado cuáles son sus intenciones. Por su parte, Pablo ha reconocido que su llegada supone "un orgullo muy grande. Han sido meses duros, aunque yo y Ángel lo hemos vivido desde lejos, pero hemos estado pendiente todos los días. Se ha podido conseguir para intentar ayudar al club, para sacarlo de una situación tan crítica, ayudar al club de mi ciudad, donde empecé a ver fútbol de Primera". Ha tenido el centrocampista palabras de agradecimiento a la afición, a la que se ha dirigido en estos términos: "Esto les ayudará a recuperar la ilusión, tras unos años en que perdíamos socios y gente que se desilusionaba, vamos a ver Castalia con mucha más gente, que es lo bonito, el comienzo de algo bonito y bueno, desde la distancia estaré apoyándolo todo y cuando acabe mi carrera, estaré codo con codo trabajando con ellos".

Por su parte, Ángel Dealbert ha destacado que lleva el clbu albinegro "en la sangre. Estuve aquí desde cadetes hasta el primer equipo en Segunda B, subí a Segunda A y viví una etapa muy bonita hasta que me fui. Ahora vuelvo con una ilusión increíble para ayudar en todo lo que pueda". El futbolista de Benlloch se ha dirigido también a la masa social del CD Castellón en estos términos: "Les pido que nos apoyen tras haber dado nosotros el primer paso. Aún no volveré como jugador, aunque nunca se sabe. Pido el apoyo de todo el mundo, el paso dífcil y complicado se ha conseguido ya, ahora dependemos de todos. Hemos puesto un ladrillito muy importante, porque sin él no sería posible nada, pero ahora dependemos de todo el mundo, que ayude un poco más después de todo lo que ha pasado. Empieza otra época, entre todos los vamos a conseguir".