El juez Santiago Pedraz ordenó este martes la detención de Ángel María Villar, su hijo Gorka , el vicepresidente económico de la RFEF Juan Padrón y el secretario de la federación tinerfeña de fútbol, Ramón Hernández Baussou. El magistrado de la Audiencia Nacional ordenó a la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) estas detenciones en el marco de la operación Soule que comenzó tras una denuncia del Consejo Superior de Deportes en 2016 que acusaba a Villar de impulsar la celebración de partidos entre la selección española y otras selecciones a cambio de contraprestaciones en forma de contratos o relaciones comerciales para su hijo Gorka Villar, experto en derecho deportivo.

El máximo dirigente del fútbol español, en el cargo desde hace 29 años, había pasado por los juzgados de Majadahonda para declarar, esta vez por el Caso Haití en el que la Federación habría supuestamente malversado fondos que estaban destinados a la creación de escuelas de fútbol e infraestructuras tras el terremoto que destruyó el país caribeño. Este no es el único caso en el que el presidente se ha visto envuelto.

Sin embargo, Villar no ha sido detenido por este ni por otros escándalos a los que se le asocia, sino por cinco delitos que se le imputan.

El primero de estos delitos es la administración desleal según el cuál Villar habría propiciado adjudicaciones de contratos a empresas de su hijo Gorka para el enriquecimiento familiar. La empresa que está siendo más investigada a este respecto es Sports and Advisers, que se habría lucrado de las adjudicaciones del presidente de la RFEF desde 2011 con cifras millonarias.

El segundo delito que se le imputa es la apropiación indebida y el tercero es la corrupción entre particulares. Ambos estarían relacionados con la compra de votos que el señor Villar habría presuntamente realizado con los recursos económicos de la Federación con el objetivo de asegurarse la presidencia de la misma a través de ciertas prevendas y comisiones.

GORKA VILLAR, CLAVE EN ESTA OPERACIÓN

La falsedad documental y el alzamiento de bienes completan la lista de delitos que se le imputan a los cuatro detenidos en la Operación Soule. Una de las figuras claves en la investigación es Gorka Villar, hijo del presidente de la RFEF, que ya se vio sacudido por un escándalo de corrupción cuando era presidente de la Conmebol y que ahora salta a la palestra como principal protagonista según la UCO, que habría estado realizando escuchas telefónicas durante los últimos tres meses y en las que se habrían descubierto maniobras ilegales que resultarían en actividades lucrativas para padre e hijo.

LOS AMISTOSOS, PRINCIPALES INGRESOS DE LOS VILLAR

La clave principal, sin embargo, es el desvío de ingresos por partidos amistosos que se producían a través de Sports and Advisers. Estos partidos amistosos se pactaban directamente mediante Ángel María Villar que supuestamente siempre realizaba las adjudicaciones a la empresa de su hijo desde 2011. Estos partidos amistosos provocaban grandes ingresos en la cuenta de esta empresa, que nunca llegaban a parar a la RFEF, sino que se desviaban supuestamente a empresas en las que los Villar serían beneficiarios.