El Peñíscola hizo los deberes y ganó 5-2 su partido ante Gran Canaria para conseguir los primeros puntos de la temporada como local. Los azulones saltaron a la pista con la clara intención de situarse por delante en el marcador. Tras unos minutos de tanteo, los del Baix Maestrat fueron encontrando ocasiones hasta que lograron marcar. La estrategia funcionó y en una falta en la frontal del área Terry pasó el balón a Juan Emilio, que no falló.

Tras el primer tanto, ambos equipos estuvieron cerca del gol. El Peñíscola tuvo el segundo con un lanzamiento al palo de Tobe y una volea muy peligrosa de Terry. Gran Canaria, por su parte, respondió con una oportunidad de Juanillo que sacó la defensa y un remate al poste de Yeray.

El 2-0 llegó gracias a una gran jugada entre Orzáez y Míchel que, con una doble pared, alcanzaron la línea de gol, donde Míchel anotó el segundo. Tres minutos después, los gran canarios redujeron la distancia. Yeray sacó una falta que pegó en la barrera, el balón quedó muerto y el propio lanzador se hizo con el rechace para batir a Molina.

El gol dio alas a los de Suso Méndez, que presionaron al Peñíscola durante los últimos compases del primer tiempo. Sin embargo, una falta de Saúl sobre Juan Emilio a tan solo 11 segundos del descanso supuso el lanzamiento de diez metros que consiguió materializar Mauricinho.

Tras la reanudación, Yeray volvió a acortar diferencias en el marcador gracias a un potente tiro que ajustó de nuevo el electrónico. Además, Juanillo tuvo en sus pies el empate, pero Tobe se lanzó con todo para impedirlo.

Los peñiscolanos volvieron a la carga aunque sus acometidas las detuvo el portero visitante Thiago. En el minuto 31 Yeray cometió penalti sobre Mauricinho y Terry acertó desde el punto fatídico. Apenas unos segundos después, el propio Terry cazó el balón y lo colocó en la escuadra con su zurda, haciendo el quinto.

Con el 5-2 desfavorable, Suso Méndez sacó a Juanillo de portero-jugador aunque terminó por desestimar este recurso en los últimos minutos de juego.