Si hay alguien que conoce bien al Villarreal y su afición, ese es José Manuel Llaneza, uno de los hombres fuertes del club desde que llegó hace más de 24 años. Y con ese conocimiento de causa, el vicepresidente del club quiso salir ayer a la palestra para dirigirse a los groguets. «Estamos en un momento vital para el club y la afición. Si no tenemos el apoyo de la gente tendremos dificultades en el futuro porque el propietario es Fernando Roig, pero el dueño es el público», aseguró.

Llaneza confía en que el Submarino cuente con el apoyo de la grada ante el Athletic, en la primera de las ocho finales que restan. «Si la gente quiere estar en Europa, tiene que demostrarlo ya desde el lunes. Hay que transmitir la necesidad de que el equipo necesita verse arropado. Si al final lo hacemos mal, que nos castiguen, pero durante el partido hay que evitar los cuatro silbidos», destacaba el dirigente, al tiempo que pide valorar lo que se tiene: «Hay 15 equipos que se cambiarían ahora mismo por nosotros. Entiendo que los chicos de 25 ó 30 años solo han conocido al Villarreal en Primera, pero para nosotros el título es seguir ahí».

«UN AÑO COMPLICADO»

No esconde el vicepresidente del Villarreal que se está pasando «por un año complicado» y destaca la ausencia del capitán Bruno Soriano: «Sé que aquí cuando pides ayuda a la gente, la gente responde y ahora les pido que colaboren con el club, que piensen que nuestro Messi o Cristiano, que es Bruno, no ha estado en todo el año y pese a eso seguimos ahí arriba».

La actual clasificación no transmite relajación al directivo: «Somos quintos, pero la ventaja es poca y tenemos que ver que de los ocho partidos que quedan, cinco son en casa, así que es clave sumar esos puntos. Por de pronto, ganar este lunes al Athletic y el martes siguiente al Leganés supondría dar un paso importante». Llaneza no oculta que se está acariciando la clasificación para Europa: «No hay ninguna comarca como esta que durante este tiempo haya jugado en 15 ocasiones competición continental».

Se refiere el vicepresidente al límite demográfico de una población que compite contra gigantes: «Estoy un poco preocupado porque parece que nuestro aficionado no se dé cuenta de lo que es Europa. Este año nos eliminó Lyón, que es la segunda ciudad de Francia con dos millones de personas, y el año pasado Roma, que es la capital de Italia. Nosotros tenemos 50.000 habitantes, y con la provincia unos 500.000».

No oculta Llaneza que en Málaga estuvieron «muy mal». «El primero que se disgustó muchísimo fui yo», dice, pero pasa página a la derrota: «No es posible hacerlo todo bien y ya hemos pasado el duelo. Ahora estamos en la resurrección y tenemos que afrontar el partido contra el Athletic con la alegría de poder ganar».

Incidía por último Llaneza en la «gran comunión que debe existir entre club y afición», al tiempo que adelantaba sus planes para el fin de semana: «El sábado veremos al Villarreal B, que puede consolidarse en el play-off de ascenso a 2ª A; el domingo veremos al Roda juvenil, que se puede proclamar campeón; y el lunes, todos al Estadio de la Cerámica».