Me gusta el fútbol bonito como a cuaquiera. Disfruto viendo jugar a Cazorla, Trigueros, Gerard Moreno, Bacca... Por supuesto me encanta ver goles, el talento individual, una pared bonita, un buen pase entre líneas, un centro desde la banda en rosca... Y ganar, porque este deporte es un juego y en el se sale a derrotar al rival. A todos nos gusta lo ideal, el coche de gran cilindrada, el modelo de belleza perfecto, el mejor restaurante... Sí, lógico. Y Javi Calleja llegó al Villarreal con una idea bonita, tras muchos éxitos en las inferiores y, sobre todo, con enormes ganas de triunfar y hacer las cosas bien. Me gusta la gente que defiende sus principios, pero también la que sabe rectificar y no se encabezona con ellos.

La temporada pasada Calleja trajo aire fresco. Y todo fue bien al principio con ese fútbol preciosista y ofensivo. Hasta que llegó un tremendo bache propiciado, posiblemente por la candidez de esa idea que podría ser utópica a tenor de sus mimbres. Y se rectificó, con altos y bajos, para acabar quintos.

El Villarreal ha empezado muy mal en cuanto a resultados. Curiosamente no me gustó nada el partido de Leganés, el único que se ha ganado porque jugando así se perderán más partidos que se ganarán. Y, sin embargo, ante el Valencia observé un equipo sólido y fiable, equilibrado y competitivo. Quizás también con miedo a la derrota, motivado por la inseguridad de los resultados anteriores. Y me dirán que el partido fue un truño, y les daré la razón, pero delante estaba el Valencia y eso también hay que valorarlo. Para mí, en Leganés, el entrenador del Villarreal se equivocó gravemente con la confección de un centro del campo débil físicamente y sin ninguna vocación defensiva. Y se ganó pero ese no era el camino. A Calleja le pido que tenga los pies en el suelo y que desde la solidez ante el Valencia se puede crecer porque tiene muy buenos jugadores. Prefiero la seriedad de ayer, que el fútbol de ruleta rusa de otros partidos. Calleja se ha puesto las pilas.

se busca mediocentro

A Calleja le faltaba un mediocentro defensivo. Lo pidió desde que supo que se marchaba Rodri. Esa pieza es básica para dotar al equipo de equilibrio. El tema de la lesión de Bruno ha condicionado mucho al club. Y me explico. Les hemos venido informando puntualmente del fair play financiero del Villarreal. Ese cumplimiento ha obligado a Roig Negueroles a tomar decisiones que quizás no hubiera querido. Bruno Soriano tiene una de las fichas más altas y lleva más de una temporada sin jugar. El club confía en su recuperación y Bruno sigue en nómina, pero sin jugar, y cubriendo un 3% aproximadamente del fair play. Igual que Javi Fuego quien también supone un desembolso importante. Luego no salieron en las condiciones que se esperaba jugadores como Cheryshev, Soriano o N’Diayé, igual que Sansone. Y esa posición se quedó coja. Y se tuvo que fichar a Iturra de urgencia. No sé si sirve o no porque apenas ha aparecido. Y mientras, ha llegado la apuesta por Funes Mori como mediocentro, muy acertada para mí, para darle más equilibrio a un equipo que necesita músculo. Las decisiones no se toman porque sí. Todo tiene explicación.

el negocio del fútbol

Los clubs callan porque nadie podía pensar hace unos años que iban a ingresar los millones que ahora están metiendo en caja equipos como el Huesca, Eibar, Girona, Levante, Leganés o Getafe. Bueno y todos los de Primera, incluido el Villarreal. La labor del Tebas gestor de recursos es impecable. No merece discusión alguna. Pero siempre digo que entre el blanco y el negro existen muchos matices. No me parece de recibo que con más de 30 grados de temperatura y unos índices de humedad tan elevados, se tengan que jugar a las 12 horas y a las 16.15 horas partidos en Valencia y Vila-real, y en Huesca se juegue por la noche. Y no comparto los horarios intempestivos porque matan la asistencia. Es un tema a reflexionar. Y para nada estoy en contra de Tebas porque su trabajo es generar ingresos y eso lo está haciendo muy bien. Los clubs también tienen la palabra.

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@josellizarraga