La diferencia entre los dos favoritos al cruzar la meta denotaba algo más que el resultado de un mundial, mostraba las secuelas de toda una temporada. Rohan Denis, con más de un minuto de ventaja respecto a cualquier otro ciclista, habiendo doblado a dos competidores, sonreía al terminar su participación, sabedor de que era campeón del mundo. A pesar de que quedaban todavía tres ciclistas por llegar, a esas alturas la exhibición del australiano, para completar una temporada inmaculada contra el corno, ya era incontestable.

Tom Dumoulin, el gran derrotado, no celebró la medalla de plata que conquistó por centésimas, consciente de que su objetivo se había quedado muy lejos. El neerlandés, segundo en el Giro y en el Tour, se quedó un buen rato petrificado al cruzar la meta, cariacontecido, con la mirada perdida, sin responder a los estímulos de su masajista, saboreando la decepción acumulada en cada segunda posición que ha cosechado durante la temporada. Tuvo que llegar algún miembro de la organización para sacarlo de su ostracismo mental y devolverle a la realidad camino al pódium.

Otra división

La de Rohan Denis fue una batalla de otra división, en la que los daños colaterales fueron a parar a Castroviejo, que inició el puerto final del recorrido con la imagen poco motivadora de que te adelante el corredor que te sucede en la contrarreloj. El corredor del Sky supo mantener la cabeza fría y conservar sus opciones frente a una subida atípica en una contrarreloj, inevitable en un recorrido por el Tirol austriaco, anfitrión de los campeonatos. El ciclista vasco terminó sexto, por detrás del australiano Rohan Dennis, campeón del mundo, el neerlandés Tom Dumoulin, plata, y el belga Victor Campenaerts, bronce.

La ascensión, con porcentajes superiores al 10 por ciento, fue desechando especialista tras especialista, demasiado rígidos para afrontar una subida tan dura después de 30 kilómetros de esfuerzo clásico contra el cronometro. Pero cuando los favoritos de la carrera llegaron a ese punto, Denis ya le había recortado un minuto y medio a Castroviejo, tenía un buen colchón de segundos respecto al resto de ciclistas, concentrados en la lucha por las medallas, y la batalla contra Dumoulin ya estaba decantada. Al australiano le dio tiempo a doblar también al bielorruso Vasil Kiryienka antes de marcar un infernal tiempo de 1 hora, 3 minutos y 3 segundos en meta, más de un minuto mejor que el segundo clasificado.

La lucha por la plata

La emoción estuvo en la lucha por la medalla de plata. El propio Castroviejo, muy vivo en la carrera pese a haber sido doblado, Kwiatkowski o Nelson Oliveira se quedaron a las puertas del podio, pero la actuación del belga Campenaerts fue sublime. Los tiempos del campeón de Europa, por delante de Castroviejo, se fueron despegando cada vez más de los del grupo de corredores que partían en su mismo escalón de favoritismo, hasta terminar casi en los registros de Dumoulin, plata por centésimas respecto al belga.

El otro español en competición, Marc Soler, estuvo lejos de los mejores, terminó en el puesto 23, con más de cuatro minutos y medio perdidos respecto al campeón del mundo.

Clasificación final del Mundial CRI

1. Rohan Dennis (AUS) 1:03:02

2. Tom Dumoulin (NED) +1:21.09

3. Victor Campenaerts (BEL) +1:21.62

4. Michal Kwiatkowski (POL) +2:04

5. Nelson Oliveira (POR) +2:14

6. Jonathan Castroviejo (ESP) +2:17

7. Tony Martin (GER) +2:25

8. Patrick Bevin (NZL) + 2:34

9. Vasil Kiryienka (BRS) +3:07

10. Martin Toft Madsen (DEN) +3:23