Exequiel Aaron Neris, de 21 años, fue asesinado en la ciudad de Posadas, en la provincia argentina de Misiones, por dos hinchas de Boca Juniors cuando estaba festejando el triunfo de River Plate en la final de la Copa Libertadores de América.

Según su madre, Lucía Ramona Neris, su hijo se arrastró moribundo hasta la casa de un amigo tras ser acuchillado y desde allí fue trasladado al Hospital René Favaloro, donde falleció horas después.

"Apenas caminaba, se había operado y tenía tres clavos en una pierna porque se cayó de la moto hace pocos meses. Lo persiguieron a pesar de que casi no podía caminar, y lo lastimaron como a un perro indefenso", declaró la madre en 'Primera Edición, el Diario de Misiones'.

Supuestamente la puñalada fue en la pierna izquierda, afectando la arteria femoral de la víctima, que había sido recientemente operado de esta extremidad. "Me mataron por ser hincha de River y por festejar", le dijo Exequiel a su madre antes de fallecer.

La policía de Misiones ya tiene a dos hombres identificados, hinchas de Boca Juniors, acusados del asesinato de Exequiel.