Fue al finalizar la temporada 2001/2002 cuando Juan Ansuategui Roca tuvo que colgar el silbato en Primera División al alcanzar la edad máxima para poder arbitrar en la élite. En ese momento puso fin a un total de 14 campañas dirigiendo encuentros de la máxima categoría, de las que en 11 fue árbitro FIFA. En total, arbitró 225 partidos de Liga, 51 de Copa del Rey (también finales), cinco finales de la Supercopa y 52 de selecciones absolutas, participando en las rondas clasificatorias de los mundiales de Estados Unidos (1994) y Francia (1998), y la Eurocopa de Inglaterra (1996).

Una sensacional trayectoria que finalizó hace ahora 17 años y desde entonces la provincia de Castellón no ha vuelto a tener ningún colegiado en la élite. Una carencia que se está alargando demasiado en el tiempo, aunque Ansuategui Roca tiene muy claro que no es nada sencillo. «Es más fácil ser notario, y mira que esto es muy complicado, que futbolista profesional y también que árbitro de Primera», señala.

En este mismo sentido el excolegiado, pese a reconocer que el nivel en la provincia es muy bueno, considera que tal vez «falte un referente en el que poder mirarse», debido a la ausencia de un árbitro de la provincia en Primera. De momento, quienes están más cerca son el benicarlando Miguel Bosch Doménech, adscrito a la delegación del Baix Maestrat, y el segorbino Iván Muñoz Pérez, perteneciente a la delegación de Castellón. Ambos han dirigido esta última campaña encuentros de la Segunda B.

cada vez más mujeres / Pese a la ausencia de un árbitro en la máxima categoría, la provincia está en un gran momento de salud en cuanto al número de colegiados que cada fin de semana se encargan de impartir justicia en los diferentes partidos que se disputan. Y es que en total y contando tanto fútbol como fútbol sala, el número de árbitros en las diferentes categorías alcanza los 265 (ver gráfico), de los que 219 pertenecen a la delegación de Castellón y 46 a la del Baix Maestrat.

Y entre estos hay cada vez más árbitras, que no han dudado en hacerse un hueco en un apartado que hasta hace muy pocos años era exclusivo de los hombres. Aunque la diferencia todavía es muy elevada —de los 265 apenas 13 son mujeres (en la Comunitat Valenciana son 94 de un total de 1.666)—, poco a poco van llegando más alto y el ejemplo más claro es el de Raquel González Ruano, una castellonense que es la única mujer en Primera División de fútbol sala y que forma pareja arbitral con el vila-realense Emilio Bernabéu Haro.

variación de la edad / Cara a la próxima temporada, la Federació de Futbol de la Comunitat Valenciana (FFCV) ha adoptado una decisión en lo que se refiere a las edades para iniciarse y terminar el arbitraje dentro de lo que son las categorías que afectan a dicho organismo. Así, se podrán inscribir en el curso a partir de los 12 años —hasta ahora se debían tener 14 años—, mientras que la edad tope para dirigir partidos será de 65 años, por lo que no podrán seguir en activo desde ahora todos aquellos que la superen.

Como en la actualidad no había una edad límite, la FFCV ya se ha puesto en contacto con los colegiados que superan los 65 años para comunicarles la medida adoptada y agradecerles su labor por el arbitraje.