El Villarreal CF no está bien y sus futbolistas lo saben. La dinámica de resultados comienza a preocupar tanto al cuerpo técnico como a los propios componentes del combinado groguet. De hecho, el centrocampista Manu Trigueros no oculta que, tras la derrota sufrida en Mestalla ante el Valencia, la «mala racha» que arrastran, con un punto de los últimos quince «es preocupante».

Los amarillos han perdido cuatro de los últimos cinco encuentros disputados y han pasado de mirar la tabla clasificatoria por la parte alta, a estar con la alerta puesta hacia la zona baja: «Teníamos Europa cerquita y ya está muy lejos. Hay que ajustar y corregir cosas para volver a encontrar la victoria y reaccionar».

Es más, uno de los puntos que considera fundamentales para reaccionar es en los partidos en el Estadio de la Cerámica: «Ahora toca hacernos fuertes en casa para volver a tirar hacia arriba».

Respecto a la derrota en el derbo, el talaverano destaca que «todo habría cambiado si hubiéramos marcado el penalti».

«Hicimos una muy buena primera parte, excepto algunos minutos. La segunda estuvo disputada y los detalles decidieron el choque. Ellos fueron los que estuvieron acertados, lo intentamos, pero no pudo ser», recalca un Manu Trigueros que aboga por «pasar página cuanto antes».