Tenía claro Óscar Cano que necesitaba realizar unos retoques en su plantilla con vistas a la segunda vuelta del campeonato. La buena marcha del CD Castellón en el presente ejercicio liguero, con el equipo siempre entre los cuatro primeros clasificados, unida la escasez de efectivos debido a las lesiones, en especial por la de gravedad de Regalón y casos como el de Verdés, hizo replantearse a la cúpula deportiva de la entidad el buscar refuerzos en el mercado invernal.

A su vez, el delantero asturiano Jairo Cárcaba, también con muchos problemas de lesiones, pidió salir como cedido, marchándose en enero al Barakaldo.

A ello se unió el inesperado traspaso de Josep Calavera —con la que el club se ha embolsado más de 40.000 euros—, uno de los jugadores más importantes y con mayor peso específico sobre el rectángulo de juego en la primera vuelta. Por dicho motivo, el grupo formado por Àngel Dealbert, Jordi Bruixola y el propio Óscar Cano, tuvo que ponerse manos a la obra para apuntalar un bloque que carecía de efectivos en todas sus líneas.

LOS RECIÉN LLEGADOS A CASTALIA

Una de las obligaciones que se marcó la secretaría técnica fue el acertar con un delantero que aportara el gol que no estaban teniendo ni Cubillas, ni Raúl Alcaina ni el citado Jairo Cárcaba. La entidad apostó por Juanto Ortuño, que llegó libre procedente del Córdoba y que tenía experiencia en la provincia al haber militado en el Villarreal B, un atacante con una dilatada trayectoria en clubs de la categoría de bronce.

La apuesta está saliendo redonda, ya que el ariete de Yecla suma cuatro goles en los seis partidos que ha disputado, promediando un gol cada 113 minutos. Juanto parece haber caído de pie en Castalia, puesto que la afición albinegra ya lo tiene como uno de sus nuevos ídolos, como quedó demostrado tras su doblete ante La Nucía o al lograr el tanto del empate el pasado domingo en el campo del Badalona.

El siguiente de los nuevos más utilizados es Alejandro Sanz, Kako. El mediocentro tudelano ha llegado de Segunda División A, cedido del Numancia, y debe aportar esa experiencia que da el haber estado jugando en un nivel superior. Por el momento, el exrojillo está ocupando el puesto de Calavera, aunque todavía se le nota falto de rodaje. Ha disputado tres partidos y 208 minutos.

Quienes por ahora deben ganarse un mayor protagonismo sobre el césped son el defensa central Adrián Lapeña, que debutó el pasado domingo en Badalona (jugó toda la segunda parte), así como Mikel Carro, joven mediocentro defensivo cedido por el Atlético de Madrid, del agrado de Óscar Cano, y que, pese solo haber jugado 17 minutos, seguro que cuenta para el entrenador.