Josep Maria Bartomeu aún se sienta en el sillón presidencial del Barcelona, pero la junta directiva le está incordiando para que deje el asiento. La perplejidad por el escándalo de las redes sociales que destapó la SER se ha transformado en una indignación mayúscula; hasta el punto de que pesos pesados de dentro le habrían solicitado un adelanto electoral, en un tenso encuentro informal de casi seis horas. La principal decisión ha sido dejar en suspenso el cargo de Jaume Masferrer, mano derecha de Bartomeu, mientras se investiga a fondo la crisis.

El mandato de Bartomeu expira en 2021, así que ese adelanto podría implicar que hubiera elecciones este verano. El presidente ha dado explicaciones al vestuario, la prensa, la comisión delegada y la directiva al completo. Está acorralado como nunca. En la reunión, Bartomeu reiteró que nunca se contrató a una empresa para que crear contenidos tóxicos y difamatorios por las redes.

Al ser un encuentro informal, los 19 miembros de la junta no pudieron tomar ninguna otra decisión que apartar de momento a Masferrer, director del Área de Presidencia, de su cargo mientras se lleva a cabo una investigación sobre la contratación de I3 Ventures, la empresa de monitorización en las redes sociales que estaría detrás de algunas cuentas difamatorias contra jugadores, exjugadores y rivales electorales.

Una vez haya concluido esta investigación, se convocará una junta extraordinaria (el próximo jueves, según algunas fuentes) en el Camp Nou, a diferencia de ayer (un restaurante en las afueras de Barcelona). No obstante, otras fuentes consideran que lo más probable es que se posponga hasta más adelante, evitando así encajarla entre el partido de Champions en Nápoles y contra el Madrid en el Bernabéu el domingo.

LA MANCHA // Bartomeu se resiste a abandonar el cargo con un escándalo que dejaría una mancha a su presidencia. También, hasta ahora, a despedir a Masferrer, señalado por los directivos como el responsable de la costosa contratación de I3 Ventures.