La escena de un grupo de runners corriendo por el parque o por las calles de Castelló, las salas de los gimnasios llenas de gente dispuesta a acabar con las calorías sobrantes, los ciclistas quemando goma por las carreteras o el jolgorio asociado a un deporte tan social como el pádel son ahora solo un recuerdo precioso de unos días pasados que todos añoran. El confinamiento obligado por la crisis del coronavirus, que tanto ha modificado nuestras vidas en las últimas semanas, ha dejado un vacío importante en nuestras agendas, el tiempo dedicado al deporte.

Horas y horas en los domicilios han generado una fiebre desorbitada por el deporte en casa, adaptado a la medida de las dimensiones de las viviendas. Y la mejor forma para cubrir esa necesidad es echar mano de bicicletas estáticas, elípticas y cintas de correr, principalmente para esa actividad física tan necesaria para muchos como es dedicar un espacio de tiempo al deporte y romper con las rutinas.

El estado de alarma decretado por el Gobierno de España el pasado sábado 14 de marzo ha pillado desprevenidos a miles de castellonenses que estaban habituados al deporte al aire libre y que por las necesidades han tenido que pasarse al ejercicio de salón.

Este cambio del outdoor (exterior) al indoor (interior) ha provocado una compra masiva de material deportivo de fitness que ha desbordado a las empresas del sector en apenas una semana, dejando sin existencias las tiendas y sin posibilidad de atender la enorme demanda existente en los productos de gama media.

Venta on line

De esa forma, muchos potenciales compradores se han encontrado con el producto no en estoc al darle a la opción de comprar en las plataformas de venta on line de las grandes firmas, confirmando que solo quedaban objetos de la gama profesional, destinados a gimnasios y con precios elevados para el deportista at home (en casa).

Javier Sanjuán, gerente de una firma del sector ubicada en Vila-real, asevera que las visitas a la web de su empresa han superado el 500% a la que se registraba los días normales. «Ha sido una auténtica locura que no esperábamos. No podemos servir la demanda que tenemos porque no hay material y las firmas no pueden suministrarlo con la celeridad que querríamos», apunta un tanto sorprendido.

Las ventas se han disparado un 200% y este porcentaje todavía podía haber sido superado. «Se nos llevan hasta las que están en la exposición y casi me las quitan de las manos», confiensa Sanjuán, quien al mismo tiempo reconoce que solo queda material profesional y que este no está al alcance de los bolsillos de los deportistas amateurs.

Lo más vendido

En el ránking de superventas actual se encuentran las populares cintas de correr, seguidas de las bicicletas estáticas y las elípticas, estas últimas subiendo muchos puntos en las preferencias de los deportistas por sus múltiples beneficios y la ausencia de impactos en las articulaciones. A ello se suman los famosos rodillos para las bicis, que se han convertido en otro de los objetos más preciados para todos aquellos usuarios que tienen bici y que no quieren perder la forma durante las jornadas que dure el estado de alarma en el país, y el correspondiente confinamiento en sus respectivos domicilios.

Una ley establecida en el comercio es la de que la numerosa demanda del mercado eleva los precios, una circunstancia que en este caso no parece haberse producido, pese a que el material de fitness se ha convertido en algo así como un tesoro en tiempos de confinamiento en casa.

Compra o alquiler

Para aquellas personas que vean esta compra de material deportivo como un boom que pasará cuando se recupere la normalidad, también existe la posibilidad de poder alquilar las bicis en algunas tiendas. Una forma de que el gasto no sea demasiado elevado en tiempos en los que muchas personas se están quedando sin trabajo al cerrar sus empresas, pero que permite del mismo modo hacer algo de ejercicio para, al menos, estirar las piernas un poco ahora que no podemos salir de casa como nos gustaría. Porque ya se sabe: deporte es salud… aunque sea en cuarentena.