El gobierno británico planea un regreso de los aficionados a los estadios en octubre, una vez se hayan desarrollado varios eventos piloto en julio, ha anunciado este viernes el primer ministro Boris Johnson.

"A partir de octubre, esperamos traer al público a los estadios y reautorizar conferencias y otras reuniones económicas", ha declarado el dirigente conservador este viernes en una conversación con la prensa. "Vamos a organizar reuniones más grandes en sitios como los estadios con una reapertura más amplia en el otoño", ha detallado.

Las reuniones en masa están prohibidas desde marzo en el Reino Unido, para limitar la propagación del coronavirus, que ha causado más de 45.000 muertos. Pero varios eventos deportivos de envergadura servirán de test para recibir público en el mes de julio: el Mundial de snooker (una modalidad británica del billar), una carrera hípica o partidos amistosos de cricket.

LA IMPORTANCIA DEL 'TICKETING'

"Aunque habrá que esperar un tiempo antes de que los estadios puedan ser llenados al 100% de su capacidad, es un gran paso en la buena dirección para la reanudación del deporte en directo en el país", se ha felicitado el ministro de Deportes, Nigel Huddleston.

Los ingresos por entradas son una fuente importante para los clubs en muchos deportes en Gran Bretaña, en particular para los equipos de fútbol que juegan en las divisiones inferiores a la Premier League.