Están siendo unas semanas de alta exigencia para el Villarreal a todos los niveles. El desgaste mental y físico de la temporada se está haciendo palpable en los amarillos, en especial en esta racha donde faltan los buenos resultados que refuercen el trabajo diario del equipo. En ese sentido, la Europa League sirvió de bálsamo la semana pasada, con un 0-2 sanador que sitúa ahora en la encrucijada al entrenador Unai Emery. Es el dilema amarillo: el cuerpo técnico se debate entre dosificar mañana contra el Salzburgo a varios titulares, poniendo en riesgo el pase a octavos, o amarrar la clasificación con el equipo de gala. Esta segunda opción no está exenta de riesgo: en este caso, de perder a futbolistas o acumular un cansancio extra que condicione el próximo partido de Liga.

Y ahí radica la complejidad del equilibrio. Más allá de la rotación habitual en la portería, donde jugará Rulli en lugar de Asenjo, Emery ha recuperado futbolistas en las últimas semanas, pero los determinantes en su esquema, como los centrales Pau y Albiol, los centrocampistas Parejo y Trigueros, o el delantero Gerard Moreno, acumulan muchos minutos en los últimos partidos del Villarreal.

Por ejemplo, en los cuatro envites más recientes, tanto en Liga como en Europa (Elche, Real Betis, Salzburgo y Athletic) han sido siempre titulares Pau Torres, Albiol, Moi Gómez, Parejo, Alcácer y Gerard Moreno. Otros como Pedraza y Foyth suman en todos los partidos, con algún descanso saliendo desde el banquillo, pero también con una carga importante. Ahora que la enfermería de Miralcamp se alivia, es la necesidad de puntuar la que alimenta el dilema de titulares y suplentes.

Para complicar el asunto, el próximo rival de Liga del Villarreal no es uno cualquiera. Es el Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone, líder del campeonato hasta la fecha. El consuelo compartido es que el conjunto colchonero también juega competición europea, aunque tendrá dos días más de descanso que el Submarino, de aquí al domingo, porque jugó anoche en el exilio de Bucarest contra el Chelsea inglés.

margen menor / El rendimiento descendente en Liga, donde el equipo no gana desde enero y acumula seis jornadas sin victoria, reduce el margen de maniobra de Emery. En este último mes y medio, el Submarino ha caído eliminado en Copa del Rey, y en Liga ha perdido comba con los cuatro primeros, quedando descolgado de la lucha por la Champions League. Además, la Real Sociedad le ha adelantado en la tabla y por detrás amenaza su sexta plaza el Betis, a solo un punto de distancia.

El reto de Unai Emery pasa ahora por compaginar ese objetivo casi obligatorio de conseguir la clasificación para la competición europea --con la posibilidad de la nueva Conference League en la baraja--, y continuar avanzando rondas en la Europa League. El tentador 0-2 obtenido en la ida en Salzburgo invita a administrar con mimo los esfuerzos.