Víctor Herrero, conocido en el mundo del fútbol como Pulga, se ha labrado con sumo esfuerzo una dilatada trayectoria futbolística que le ha llevado por varios continentes. Hace poco más de 15 años, Pulga era un chaval de Almassora que jugaba en el filial del Castellón en Tercera División, sin embargo, en la temporada del regreso a Segunda A del primer equipo albinegro marcó un golazo en Chapín al Xerez.
Un talentoso centrocampista que, tras asomar la cabeza en el fútbol profesional comenzó una extensa carrera en diferentes clubs como el Logroñés, Villarreal B, Toledo, Alzira, Conquense y Rayo Majadahonda en España, y experiencias en el extranjero en equipos como el Iraklis (Grecia), Khallitea (Grecia), Kerala Blasters (India), Mitra Kukar (Indonesia), Nacional de Potosí (Bolivia) y Al Wusta (Omán).
Faceta de presidente
Su orgull almassorí le llevó a una faceta bien distinta a la de golpear al balón, ya que Víctor decidió aceptar la presidencia y la dirección deportiva del Almazora (cargos que sigue compaginando) en un momento complicado en el que el club de su pueblo vivió su descenso a Regional Preferente. Actualmente el cuadro blanquinegro es líder del Grupo I de Preferente y sueña con regresar a la categoría nacional, además de ello la cantera almazorense goza de buena salud.
Ahora, también entrenador
Pero la pasión de Pulga por el fútbol ha provocado que comience su andadura por los banquillos en solitario (estuvo de segundo en la Super Liga de la India) y desde hace un par de semanas dirige al Benicarló, eso sí, manteniendo firme su compromiso como presidente del Almazora. Pulga ha suplido a Ramón Llopis como técnico y lo ha hecho con la intención de reconducir la situación del equipo en pos de lograr la permanencia en Tercera División en la campaña de su regreso tras casi tres décadas de ausencia en la categoría.
El nuevo técnico del histórico CD Benicarló tiene en su haber los tres títulos de entrenador, que se los sacó durante su carrera futbolística, amén de un curso de dirección deportiva, conocimientos que comenzó a poner en práctica en el Almazora, a través de la gestión y dirección de la entidad blanquinegra.
«Yo siempre me he quedado con ganas de sacarle jugo a una plantilla, puesto que un director deportivo pone los recursos pero quien les saca beneficio es el entrenador, es algo que siempre me ha motivado», explica a Mediterráneo el nuevo míster benicarlando.
Hace dos ejercicios Pulga ya se estrenó como segundo entrenador en la Super Liga de la India de la mano de Iriondo, donde tuvo libertad para tomar decisiones. «Quería ya ser primer entrenador», destaca el exfutbolista, presidente, director deportivo y entrenador.
El almazorense reconoce la ilusión que le hizo la propuesta de la entidad cadufera. «No dudé cuando me llamó el Benicarló. Conocía al equipo, a la plantilla y me encantan los retos, en este caso revertir la situación del equipo. Este proyecto me genera mucha ilusión, con las ganas de comenzar a entrenar ya como primer técnico», asegura Víctor Herrero.
"Si he podido gestionar el Almazora desde la India, lo podré hacer aunque entrene en Benicarló"
Combinación compatible
Una de las grandes incógnitas es saber cómo va a poder alternar la presidencia y el cargo de entrenador. «Es muy fácil compaginar la dirección del Almazora con mis funciones de entrenador del Benicarló. Cuando no entreno allí estoy ejerciendo labores de gestión en el José Manuel Pesudo», indica Pulga, que asegura que se pueden compaginar ambos cargos sin problema: «Si he podido llevar bien las gestiones del club estando en la India, más lo puedo hacer ahora que tengo que ir cuatro tardes a Benicarló. Hay que meterle muchas horas y estar en pleno contacto con coordinadores, entrenadores, etc. Tengo que tener el teléfono operativo 24 horas los siete días de la semana», incide.
Sus números en el Benicarló
En las tres jornadas que ha dirigido al cuadro del Baix Maestrat, el almazorense no conoce la derrota, con 5 puntos de 9 posibles, concretamente, una goleada en Silla, un empate en Vilamarxant y otras tablas en casa frente al campeón del subgrupo A, el Alzira. Ahora la meta de Pulga pasa por certificar la permanencia del Benicarló en una 2ª fase en la que los caduferos deben clasificarse entre los cuatro primeros de una liguilla de nueve equipos.
