La buena dinámica, en gran parte basada en la notable eficacia cara a puerta, tiene al CD Castellón muy bien situado, a siete jornadas del final. No obstante, su entrenador, Juan Carlos Garrido, advierte que la clasificación aún puede cambiar mucho en las siete jornadas restantes.

«Lo primero, y lo más importante, es que juguemos con la mentalidad de saber que quedan siete partidos; que en cada encuentro estamos dando un paso adelante hacia la permanencia en la categoría», pidió Garrido a sus hombres respecto a la visita de mañana (20.30, hora peninsular) al Heliodoro Rodríguez López. 

«Sabemos que el partido perfecto no existe, que hay errores..., pero este equipo tiene varias cualidades importantes, como una capacidad de esfuerzo grandísima, la capacidad de saber reaccionar... Y luego esa eficacia cara al gol, que es la gran virtud del equipo y en la que realmente el equipo se basa para conseguir victorias» dijo sobre esa secuencias de triunfos por la mínima; especialmente los tres últimos, por 1-0 o 0-1, frente a Oviedo, Albacete y Mallorca.

«Este equipo tiene varias cualidades importantes, como una capacidad de esfuerzo grandísima, la capacidad de saber reaccionar... Y luego esa eficacia cara al gol, que es la gran virtud del equipo»

Juan Carlos Garrido - ENTRENADOR DEL CD CASTELLÓN

Cuestión de dinámicas

«La palabra dinámica es clave en los equipos», prosiguió con su ideario. «Cuando la creas, positiva o negativa, esa dinámica, al final, es la que te lleva», recalcó. «En este caso estamos en una dinámica positiva; lo que pasa es que se crea a base de trabajar», dijo para todos aquellos que piensen que es cuestión de suerte. «La dinámica del equipo es la de competir y de mucho esfuerzo, porque los jugadores saben que el esfuerzo es básico; que el trabajo colectivo es fundamental; que esa eficacia cara a gol entra dentro de nuestra dinámica, porque el equipo juega concentrado los partidos», enumeró.

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Dinámicas y estados de ánimo también. «Hay que saber mantener esa estabilidad emocional cuando un partido se pierde, porque hay muchos de los de alrededor del equipo que entran en depresión y, entonces, nosotros tenemos que saber venirnos arriba», expuso ante una derrota. «Y cuando se gana, se entra en la fiesta del año, pero también debemos saber estar en nuestro sitio», manifestó respecto a los triunfos.

«Quedan siete partidos: pueden pasar muchas cosas, malas, regulares y buenas», rubricó Garrido, a modo de resumen. Es decir, estar preparados ante todo.