Comenzó la temporada 2020/21, la de su debut en el fútbol profesional, algo más alejado de su posición habitual sobre el terreno de juego, concretamente actuando como centrocampista organizador en vez de como extremo. Pero el paso de las jornadas y el cambio de entrenador en el CD Castellón le han ido dando distintos roles en el equipo. Rubén Díez (Zaragoza, 18 de agosto de 1993) se ha convertido en un goleador inesperado en el conjunto albinegro, sacando a relucir el mismo olfato goleador que mostró en su etapa de juvenil en el Stadium Casablanca aragonés temporada atrás. Y todo gracias al hecho de volver a jugar más adelantado, bien como mediapunta e, incluso, como delantero.

Con su gol ante el CD Tenerife el pasado domingo, el futbolista maño alcanzó las siete dianas, siendo el máximo goleador del primer equipo y, actualmente, el referente en el ataque del cuadro orellut. Una actuación a la que se han de sumar cuatro asistencias en los partidos ante el Sporting, Girona, Las Palmas y Mallorca, que están completando un gran año para un futbolista con calidad y que se está echando al equipo a las espaldas en plena lucha por la permanencia en Segunda.

«El del Tenerife era el partido idóneo para ganar por su expulsión en el minuto 30, pero no pudo ser así y al final nos llevamos un punto. Hay que analizar el partido, corregir errores, reforzar las cosas que hemos hecho bien y empezar a pensar ya en la siguiente final contra un rival directo como el Logroñés, en el que hay que sacar los tres puntos sea como sea», confesaba Rubén Díez, quien precisamente estrenó su cuenta goleadora este curso en Segunda División con el tanto del empate en Las Gaunas (1-1) ante el rival de este domingo en Castalia (18.15h).

Máxima motivación

«Es nuestra siguiente final. Ganando daríamos un buen salto en la clasificación. El equipo se va a dejar la vida en sacar cada partido adelante para conseguir el objetivo de la permanencia, que la afición no tenga ninguna duda de ello. Saldrán las cosas o no pero solo pensamos en sacar los tres puntos en cada partido», dijo Rubén Díez.

Además de los tantos marcados ante el equipo riojano y el tinerfeño, el extremo aragonés marcó en la derrota por 3-1 ante el Almería e hizo doblete en las victorias ante el Cartagena (2-1) y Las Palmas (4-0) en Castalia.

El zaragozano está muy cerca de batir su marca personal a nivel de goles, que está fijada en los 10 que firmó la temporada 2017/18 en Tercera con la SD Tarazona. También ha jugado en el Stadium Casablanca, el Valdefierro, Almudévar, Ebro, Zaragoza Aragón (filial del Zaragoza), Tarazona, Teruel y, desde enero del 2019, en el Castellón, donde afronta su tercera temporada vestido de albinegro.

Sin lugar a dudas, su fichaje por el conjunto de la Plana le cambió la vida ya que pasó de jugar en Tercera a hacerlo en Segunda B, lograr la permanencia y, un año después, dar el salto al fútbol profesional, donde ahora pelea para que sus actuaciones, y sus goles, acaben siendo decisivos.