El Villarreal C, que tuvo contra las cuerdas al Silla durante varios minutos, acabó perdiendo su partido en el Vicente Morera, con dos goles locales en la recta final del encuentro. El filial amarillo se adelantó muy pronto en el marcador con un gol de Tiago Geralnik, de falta directa, pero no sentenció y eso le pasó factura. En la segunda parte primero Lucas Carbonell y después Rulo, desde el punto de penalti, voltearon el marcador. Al final, segunda derrota consecutiva para el equipo de la Plana Baixa. 

En la primera parte el equipo de Pere Martí fue de más a menos y acabó imponiendo su ley. Los vila-realenses, con un juego animado y bien hilvanado, encontró espacios para llegar a las inmediaciones de la portería valencia. A pesar de las llegadas, el equipo de la Plana Baixa sólo pudo deshacer el 0-0 en una acción a balón parado, en el minuto 12. 

El colegiado Antonio Javier Rodríguez Rodrigo, de la delegación del Camp de Morvedre, cobró falta a favor del filial amarillo en la frontal del área local. El argentino Tiago José Geralnik la pidió y de magistral lanzamiento coló en balón por la escuadra, donde no podía llegar el arquero local Toni Belmonte. Un gran gol para poner en ventaja a los vila-realenses. 

El Silla de David Sanz poco a poco fue cobrando protagonismo. Empujado por el aliento de la afición ‘blanqueta’ empezó a llegar a la portería de Rubén Gómez, aunque sin llegarle a inquietar. Con esa mínima renta de 0-1 se llegó al descanso. 

Perdonó y lo pagó

Tras el paso por el vestuario, el Villarreal C volvió a quemar demasiados cartuchos. Muchas llegadas y remates, pero el 0-1 no se alteraba. Y claro, en un centro desde la banda, el atacante Lucas Carbonell puso el 1-1 en el minuto 73. La cosa no quedó ahí. El colegiado cobró penalti en el minuto 88 contra el filial. Además, le mostró la roja al central Abraham del Moral. Rulo lanzó desde el punto de penalti y estableció el 2-1 con el que finalizó el partido.