Primer encuentro de la temporada en la Superliga 2 y primera victoria para el UBE L’Illa-Grau. El equipo que dirige Carlos Cavalli tuvo que trabajarse mucho el triunfo ante el CV San Roque Batán.
Fue un partido de lo más competido y los dos rivales demostraron un buen nivel aunque con los correspondientes desajustes propios del inicio de temporada. De hecho, el primer set fue un toma y daca por parte de los dos planteles hasta que los locales se desmarcaron, con seis puntos arriba.
Parecía que se le ponía de cara a los castellonenses el primer set, pero los canarios no habían dicho la última palabra y apretaron en los últimos puntos aunque no llegaron a alcanzar a los de Cavalli, quienes establecieron el 1-0 con un parcial de 25-21.
La inercia ganadora llevó al UBE L’Illa-Grau a salir como un vendaval en el segundo set y a los castellonenses no les costó nada dominar el encuentro en juego y en el marcador, estableciendo un cómodo parcial de 20-14 que permitía pensar que el parcial estaba visto para sentencia. Sin embargo, y al igual que en el primer set, el San Roque sacó a relucir su acierto para poner contra las cuerdas a los locales, recortando la distancia a dos puntos (24-22) y obligando a los de Cavalli a hacer valer su experiencia para poner el 2-0 con un parcial de 25-22.
El San Roque no quería marcharse de vacío e hizo todo lo posible para lograrlo. El cuadro visitante fue sumando hasta llegar al 17-17, que fue el punto de inflexión para los de Cavalli.
En ese momento, los de la Plana fueron conscientes de que si seguían jugando así acabarían cediendo y fue entonces cuando se reajustaron, se pusieron 20-18 y se exprimieron aprovechando los errores del rival y sus propios aciertos para, con más sufrimiento del esperado, acabar superando a los canarios por 25-23.
