Carrerón para decidir el título de Moto3. Otra carrera a tumba abierta, de las que las pulsaciones nunca bajan de la línea roja, con continuos toques, de los que dejan los carenados rayados, interiores imposibles y frenadas de locura. Así fue la penúltima fecha del Mundial (la última será el próximo domingo en Cheste), con un Sergio García Dols (GasGas) que regresaba con ganas de demostrar que de no ser por la caída de Austin (EEUU) que le mantuvo cinco semanas alejado de los circuitos debido al hematoma en el riñón que le produjo, hubiera tenido mucho que decir en este desenlace del campeonato.
De hecho, pese a que solo ha sumado 13 puntos de los últimos 150 en juego, el burrianense se mantiene tercero de la clasificación. Pero el pupilo de Aspar nunca mira atrás, vive del presente, que pasa por despedir el año con victoria en un circuito que considera su casa (en sus tres carreras mundialistas en el Ricardo Tormo suma un triunfo y dos segundos puestos). Ayer, en Portugal, peleó por la que habría sido su cuarta victoria del curso. Salía desde la pole en un gran premio con los ojos puestos en dos pilotos, Pedro Acosta (KTM) y Denis Foggia (Honda), los dos aspirantes al título.
Caída
Y entre ellos dos, y los primeros espadas de Honda y KTM, se desató un baile de adelantamientos que relegó a Sergio incluso por detrás del top-10, aunque las sensaciones que transmitía eran de que iría a más. Y eso fue lo que pasó, que remontó y estuvo entre los primeros hasta el momento clave, la última vuelta y, como en abril en la primera carrera del año en Portugal, la temida curva 3. Binder se pasó de frenada en su ataque a Sergio que iba tercero, barrió a Foggia y Acosta se quedó solo en cabeza y directo hacia su primera corona. El cabreo del italiano fue monumental, hasta el punto que cuando el surafricano (descalificado) fue a pedirle disculpas al box, lo echaron de muy malas formas.
"Estábamos haciendo una muy buena carrera. Las sensaciones con la parte de atrás de la moto no eran las mejores y tenía poco agarre, pero me he esforzado al máximo y he luchado todo lo que he podido. En la última vuelta, otro piloto nos ha dejado fuera de carrera, pero ahí no podemos hacer nada. Estoy contento porque estamos preparados para Valencia y, cinco semanas después de la lesión, me siento fuerte y sin molestias para pilotar. Ahora toca terminar la temporada lo mejor posible", manifestó el castellonense.
