- Multimedia
- Clasificados
- Servicios
-
- Castellón
- Castelló Ciutat
- Vila-real
- Comarcas
- Villarreal CF
- CD Castellón
- Deportes
- Opinión
- Economía
- Cultura

Ver más galerías relacionadas
Yolanda Peris
Ver galería >Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Fotos: Manolo Nebot, Andreu Esteban, Erik Pradas
Castelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.
Noticia guardada en tu perfil
Ver noticias guardadasCastelló amaneció este domingo 27 de febrero al son de los petardos que anunciaban la salida del 10K Facsa y del Marató bp, y también de la música que los grupos de animación pusieron en la calles de la capital de la Plana. Desde bien pronto las 21 agrupaciones que se repartieron por los 42 kilómetros del recorrido se convirtieron en un protagonista más de la gran fiesta del atletismo castellonense, arropando a todos los participantes y demostrando por qué el de Castelló es uno de los mejores maratones populares del país. Hubo batukadas, sevillanas, dolçainers i tabaleters, disc jockeys, disfraces, bailes modernos y otros más clásicos, gimnastas, pancartas con distintos mensajes, animadoras... Y, sobre todo, mucho público repartido por Castelló desde la salida de los primeros corredores hasta la llegada de los últimos, casi cinco horas y media después de completar los primeros metros. Los participantes, tanto de la carrera de diez kilómetros como de la de 42, sintieron el calor y el cariño de familiares y amigos en todo momento, pero también de gente anónima que salió a animarles por la ciudad. A algunos el paso de los corredores les pilló desayunando en las terrazas de las cafeterías del centro de Castelló y otros salieron a los balcones de sus domicilios, incluso en pijama y con el vaso de café en la mano, para dar todo su aliento a los valientes que peleaban por superar sus mejores registros deportivos o, simplemente, por completar una prueba de la exigencia de un maratón. Castelló volvió a estar a la altura de la cita deportiva más importante del año en la ciudad, demostrando que había muchas ganas de salir a la calle, de practicar atletismo y también de ir recuperando poco a poco la vieja normalidad tras dos años en los que la pandemia del coronavirus cambió por completo nuestra vidas. Este miércoles 2 de marzo, el Periódico Mediterráneo ofrecerá un suplemento especial de 16 páginas a todo color con las mejores imágenes de las dos carreras: el Marató bp Castelló y el 10K Facsa Castelló.