El sol sale después de la tormenta. La delicada situación económica del Club de Tenis parece tener vías de solución. La inviabilidad financiera con el modelo que había regido desde su fundación hacía insostenible la continuidad de actual tipo de gestión. Esta situación condujo a la junta directiva de la emblemática entidad castellonense, con más de 50 años de existencia, a proponer la única vía posible para dar continuidad en el futuro: la venta de las instalaciones y terrenos del CT Castellón para que pasara a manos de un inversor privado que asumiera la explotación y el riesgo de la actividad.

Mediterráneo ya informó hace unas semanas del riesgo en el que se encontraba el CT Castellón, con una fuerte deuda que imposibilitaba la continuidad con las actuales circunstancias. Ese fue el motivo de la dimisión de la anterior directiva presidida por Mario Molina, que dio paso a una junta gestora. Ante el riesgo de desaparición, a última hora se presentó una junta de salvación presidida por Jorge Bellés que ha ido dilatando lo que ya se apuntaba como única solución para mantener la actividad deportiva. Las propuestas de una derrama entre los socios, una de las posibilidades para alejar la venta, tampoco fue aceptada en una asamblea extraordinaria, ante lo cual la actual junta directiva optó por abrir un plazo para aceptar propuestas de compra. La fecha límite para la aceptación de plicas concluyó el 22 de marzo. Durante este periodo, iniciado el 4 de marzo, se fueron recibiendo peticiones para solicitar información acerca de la situación financiera del club desde diferentes puntos, incluso de fuera de España, tras el anuncio de la entidad de poner a la venta sus instalaciones.

Solo una propuesta de compra en el plazo marcado

Una vez concluido el plazo marcado, solo se ha recibido una propuesta en tiempo y forma proveniente de la empresa Tenis Drive, dedicada a la gestión de actividades deportivas con sede en Castellón y con 20 años de actividad y experiencia en el sector. El proyecto presentado contempla continuar con la continuidad de la actividad deportiva en las instalaciones, a través de una inversión económica encaminada a la mejora de las instalaciones, con un formato de gestión diferente que pretende solventar la crisis económica de la instalación. La plica presentada por Tenis Drive plantea no solo la inversión, sino también asumir las deudas contraídas por el Club de Tenis Castellón con terceros (proveedores y entidades financieras). Además, la subrogación de los contratos en vigor (personal y otros).

La asamblea extraordinaria tiene ahora la palabra

Una vez cerrado el plazo de recepción de propuestas, el siguiente paso es la aprobación de la venta de las instalaciones por parte de los socios asambleístas del club. La asamblea general extraordinaria, cuya convocatoria se prevé para el mes de abril, valorará la propuesta de compra de Tenis Drive y decidirá mediante votación el futuro de la instalación. Las instalaciones del Club de Tenis Castellón seguirán formando parte de la historia de la capital, pero ahora con un modelo de gestión privada. El match ball de la supervivencia del club se ha saldado con éxito ante la existencia de una oferta de compra. Solo falta el último y decisivo paso.