Aunque históricamente siempre ha sido considerado un deporte para hombres, cada vez son más las mujeres que se animan a practicar boxeo. Algunas lo hacen para tonificar su cuerpo porque se incrementa la masa muscular, pero otras se están dedicando de manera más profesional. Nombres como el de Esther Paez, la primera boxeadora profesional en la historia de España; o Joana Pastrana, primera fémina en ganar el Campeonato de Europa de peso mínimo, han ido sonando con mucha fuerza en las últimas décadas y se han convertido en referentes para las púgiles más jóvenes, como la castellonense Paula Requena (Castelló, 8 de abril del 2004), quien empieza a despuntar en el ring.
La púgil del Club Boxeo La Unión empezó a boxear meses antes de la pandemia del coronavirus. Buscaba algo diferente a la gimnasia rítmica que practicó durante nueve años y entonces recaló en la entidad de la capital de la Plana por recomendación de sus tíos. «Empecé entrenando en diciembre del 2019 y, tras la pandemia y viendo que me gustaba, decidí tomármelo más en serio», explica la boxeadora.
Y es que Paula pronto demostró las cualidades técnicas que atesoraba. «Poco después del confinamiento, en la primera concentración nacional que hubo, nos la llevamos convocada y el resto de técnicos vieron que despuntaba», recuerda su entrenador, Marco Pérez. No les falló para nada la intuición, ya que, meses después, la joven alzaba el título autonómico de su categoría (63 kg) y tan solo un problema de sangrado en la nariz que arrastra desde pequeña le privaba de proclamarse campeona de España.
«Iba ganando la final de sobra, pero le empezó a sangrar la nariz y el médico paró el combate. En el boxeo, cuando hay un poco de sangre, se paran los combates y, si en tres veces no para, se le da el triunfo a su oponente», recuerda Pérez, quien ensalza de igual modo el subcampeonato logrado en el Boxam por idéntico problema.
«Ha hecho combates épicos, plantando cara a rivales mucho más hechas. Y eso le ha valido para ser convocada por España para el Torneo Perla del Adriático en Montenegro, donde ha logrado un merecidísimo oro. Paula tiene calidad, boxeo, saber estar, inteligencia y pega muy duro. Tiene un gran futuro por delante», detalla su entrenador.
Sus éxitos no han tardado nada en llegar y la castellonense se concentra este domingo de nuevo con la selección femenina joven para preparar el Europeo en Bulgaria. «La verdad es que nunca habría imaginado conseguir tantos éxitos y tan rápido, pero eso te demuestra que con trabajo y dedicación todo se consigue. Es verdad que hay días que tienes menos motivación que otros, pero luego te llaman para competir con España o ganas un combate y ves que el sacrificio merece la pena», confiesa ilusionada ante el nuevo reto que se le presenta.
«Nunca se sabe qué puede pasar, pero yo entreno con el objetivo de llegar lo más lejos posible», concluye Paula, quien compagina el boxeo con el grado medio de Técnico Superior en Actividades Físicas y Animación Deportiva (TAFAD) en Castelló.
