'France Football' ha designado a Karim Benzema Balón de Oro 2022 cumpliendo los pronósticos que designaban al delantero francés del Real Madrid como el mejor jugador del mundo la pasada temporada. Karim anotó 15 goles en Champions, llevando al equipo a la conquista del título, a lo que sumó 28 tantos en Liga que le convirtieron en pichichi. Y a eso añadió su regreso a la selección francesa, donde también conquistó el título en la Nations League en la pasada edición.

Un palmarés que le convierte, con 34 años, en justo ganador del Balón de Oro, galardón que en categoría femenina ha recaído, por segundo año consecutivo, en la española Alexia Putellas. El Real Madrid, ganador de Liga y Champions la pasada temporada, ve reconocido su dominio en una gala que ha coronado a cuatro de sus futbolistas en el top-10Modric, Vinicius, Courtois (reconocido como mejor portero, con el premio Lev Yashin) y el propio Benzema.

Para el francés, todo empezó en realidad en 13 años. El teléfono de Karim sonó y al otro apareció la voz de uno de sus hermanos: “Tienes que venir a casa rápido”. Pero Benzema, que estaba con sus amigos, no hizo mucho casa: “Ando con los chicos. No tengo tiempo ahora, iré más tarde”. Entonces el delantero escuchó algo que nunca habría pensado: “¡Tienes que venir ya! Florentino está aquí. En casa, en el salón”. Karim cogió su coche y partió rápidamente rumbo a casa mientras pensaba: “El hombre que ha fichado a Zizou, a Ronaldo, a los Galácticos... está en mi salón esperándome”. No se lo acababa de creer, pero al abrir la puerta de su casa allí estaba Florentino. Casi ni hablaron, se dieron la mano y lo demás es historia.

El Nureyev de los goleadores

Ahora Karim ha recogido el Balón de Oro completando así la mutación deslumbrante de un unicornio del fútbol que ha sumado a su elegancia innata el instinto asesino de un sicario del área. Lo que le ha convertido en el Nureyev de los goleadores. El francés, introvertido hasta límites inquietantes en su primera etapa, aquella en la que Mourinho le comparó despectivamente con un gato cuando necesitaba un perro de caza, es hoy un tigre de Bengala. Pero no solo se ha transformado futbolísticamente sumando ese colmillo goleador a su clase natural, también ha madurado hasta convertirse en referente y capitán del Real Madrid más increíble de todos los tiempos. El que ganó la Champions más impensada de la historia y el que acumula cinco Copas de Europa en las últimas nueve ediciones.

Karim debería subir a recoger el Balón de Oro con la mano vendada. El síntoma más reconocible de su transformación. El 13 de enero de 2019, en un partido ante el Betis, el francés se retiró lesionado en la mano tras un encontronazo con Bartra. Las pruebas revelaron una rotura y se le recomendó pasar por el quirófano, pero el delantero optó por evitar la operación y prefirió vendarse aparatosamente la mano para no perderse partidos y dejar al equipo huérfano de referentes en ataque. Cristiano había salido y Solari no tenía otra figura arriba. Finalmente Benzema se operó el dedo al acabar la temporada, pero el resultado no fue el esperado y el francés terminó recuperando su aparatoso vendaje durante la pandemia. Le han recomendado volver a operarse, pero eso conllevaría perderse dos meses de temporada y Karim ha vuelto a priorizar su ayuda al equipo, al tiempo que su vendaje se ha convertido en un icono del madridismo, como la silla de Alaba o aquella rodillera de Chendo.

Poco tiene que ver este Benzema con aquel joven que llegó de Lyon. Ha dejado atrás sus compañías peligrosas, aquellos líos con los coches, los devaneos con Rihanna... Hoy Karim está centrado en disfrutar de sus hijos Ibrahim y Melà. Ha cambiado sus hábitos de vida convirtiéndose en un estajanovista que esculpe su cuerpo con trabajo en el gimnasio y con una alimentación que ha cambiado con la ayuda del chef Alberto Mastromatteo. Karim se nutre de una dieta personalizada que le ha hecho perder casi diez kilos en la que se mezclan microalgas, pastas o tartar de atún.

Hoy ha sucedido a Zinedine Zidane, el hombre que más ha creído en él como futbolista, en la lista de ganadores franceses del prestigioso Balón de Oro que entrega France Football. En el salón de casa de los Benzema, que ya no es aquella que visitó Florentino hace 13 años en el conflictivo barrio de Bron, a las afueras de Lyon, reina la felicidad. Gressy, Sabri, Nafissa, Faryd, Lydia, Sofia, Celia y Leticia y Karim, sus siete hermanos verán cumplir al pequeño ‘Coco’ un sueño. Nadie podrá decir que Karim no avisó. El día que fue a entrenar por primera vez con la plantilla del Olympique de Lyon, aquel joven cansado de las bromas que le hacían Carew, Maoluda y Wiltford les advirtió: "He sido vuestro recogepelotas, pero ahora vengo a competir con vosotros y a hacerme con la camiseta número 10". Hoy aquel niño es el delantero más sofisticado del mundo. El jugador hace tiempo que lo era.