Así sin esperarlo, Kevin Sánchez recibió una llamada que cambió sus planes: "Asier Martínez se ha lesionado y vas al Europeo de Estambul". Y así, sin tiempo para asimilarlo, el atleta del Playas de Castellón, de 23 años, llenó la maleta de ilusión y responsabilidad para competir en los 60 metros vallas en su primer absoluto. "Fue un cambio brusco y a la vez un sueño", relata una semana después. De la gran celebración por el pase a semifinales, a la frustración por quedarse a tan solo una centésima de la gran final. Una final que sí disputó su gran amigo y compañero del Playas, Quique Llopis, quien sufrió una caída que todavía conmociona a Kevin: "No estoy preparado para ver la repetición, me temí lo peor. Por suerte ya está bien y todo quedó en nada". 

Imagen durante el Europeo de Estambul. MEDITERRÁNEO

De Tenerife a Castelló

Nacido en Arona (Tenerife) pero sin acento canario, guarda el cariño a la tierra de su familia pero se siente castellonense porque tenía seis años cuando abandonó las islas por un problema de salud: "Nací con desnutrición y era muy delgado. Mi madre tomó la decisión de viajar a València y me ingresaron en el Hospital de la Fe", recuerda con un nudo en la garganta, al tiempo que acto seguido dice entre risas que "me siento medio-medio". De hecho, pocos son los que saben que nació en tierras tinerfeñas y siempre le han considerado de Castelló de tota la vida.

Al recuperarse, y como regalo, sus padres lo apuntaron al Burriana CF. Le encantaba el fútbol, pero el destino le tenía preparado un nuevo deporte. A los 13 años superó una prueba en Penyeta y arrancó su idilio con el atletismo: "Lo quería compaginar pero no podía y me decanté por seguir corriendo" 

De Penyeta a Estambul

Unos inicios que no fueron fáciles para Kevin: "Uff (resopla), el cambio ha sido brutal, me costaba mucho saltar las vallas y la progresión ha sido increíble". Una tremenda evolución que le llevó a ser el único castellonense en el Europeo celebrado en Estambul días atrás: "No me lo creía cuando me lo comunicaron". 

En la pista voló y logró acceder a semifinales. Quedó el quinto en la primera serie y estuvo 40 minutos esperando con una máxima tensión. "Seguía dentro y cuando vi que estaba en semifinales no me lo creía. Estaba viviendo un sueño porque para mí significaba mucho, me quedé en shock y lo celebré mucho", cuenta. 

De la felicidad a la crueldad. En semifinales, por solo una centésima no se metió en la gran final, a la que sí accedió Quique Llopis: "Hice mi carrera muy concentrado por la calle uno. Pensaba que había quedado sexto o séptimo, pero era quinto. Cuando vi que el cuarto había hecho 7.74 y yo 7.75 no me lo creía. Lo que cambia una centésima». Sin embargo, se marchó muy orgulloso: "Me dejé todo, luché hasta el final y ahora toca seguir mejorando". 

Kevin debutó en un Europeo Absoluto. MEDITERRÁNEO

En ‘shock’ por lo de Llopis

Una final que quedó marcada por la caída de su compañero y atleta del Playas Quique Llopis. Así lo vivió Kevin: "Estaba en la pista y entré en shock al ver su caída. No se movía y fueron minutos muy duros. No he visto la repetición ni estoy preparado para verla". Emocionado por la situación, cuenta que "hasta que los médicos no levantaron el pulgar hacia arriba no se quedaron tranquilos y que temieron lo peor". Además, explica la gran relación que mantienen: "Llevamos dos semanas viviendo juntos en los hoteles, todo ha sido con él y somos muy amigos". 

Tras su recuperación, contactó con él para mandarle todo su ánimo: "Hice una videollamada y le dije: ‘No sabes cómo he llorado’ y se reía. Tenía una herida en el ojo y sangre dentro del oído izquierdo, aún no oía bien, pero no es nada grave. Lo vi más animado y aún se me pone la piel de gallina".

Ahora, y con una semana de descanso, Kevin afronta con máxima ilusión lo que resta de 2023: "Este año hay Mundial al aire libre, es muy difícil ir pero lo voy a intentar, lucharé por estar entre los primeros. Es uno de los retos, estar en un campeonato del Mundo, que sería mi primero". 

A largo plazo y como uno de sus sueños, dice que disputar unos Juegos Olímpicos sería lo máximo: "Un sueño a largo plazo obviamente como todo atleta es ir a unos Juegos Olímpicos. Pare ello, tengo que seguir progresando en el Playas y competir en los Europeos y Mundiales".