Tras confirmarse la decisión de Fernando Roig de dejar de patrocinar a través del proyecto Endavant Esports a los 14 clubs de Castelló, el sentir de los afectados era el mismo. Todos ellos se encuentran ahora en una situación de desasosiego y de incertidumbre por ver qué opciones se les planteará desde el Ayuntamiento para tratar de compensar la pérdida de un importante montante económico que les permitía mantener su viabilidad y competir con los mejores.
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Esos 14 clubs afectados son el CA PlayasCastellón, TAU Castelló, CFS Bisontes Castellón, CV L’Illa Grau, CV Mediterráneo, CV Grau Castelló, CD Balonmano Castellón, Club Natación Castalia Castellón, Hockey Club Castellón, Club Waterpolo Castellón, Club Patí Castalia, Club Triatló Tritrail de Castelló de la Plana, Club Natación Nados Castellón y Club Natación Azahar Sincro.
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Salvo variaciones en los próximos días, todos ellos volverán a reunirse con la alcaldesa a finales de la semana que viene para que ella les cuente de primera mano cómo fue la reunión de ayer mantenida con Roig y las posibles alternativas que se estudiarán con el fin de que se les pueda ayudar a mantener sus proyectos en marcha.
La solución
En vistas a que no se pudieron acercar posturas y que estos clubs perderán un importante montante económico que les permitía tomar parte en las principales competiciones de sus respectivas modalidades deportivas, desde el Ayuntamiento de Castelló se pasará ahora a estudiar posibles alternativas para compensar tal pérdida. Una idea que la propia Marco ya transmitió a los afectados el pasado miércoles en la reunión que mantuvieron todos los implicados en el Patronat d’Esports después de escuchar cada caso y ver de qué forma les afectaba la no renovación del convenio con Endavant Esports.
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Y es que cada club, en función de los distintos criterios establecidos por el propio Villarreal, obtenía cantidades muy diversas temporada tras temporada, cifras que podían oscilar desde los mil euros hasta los más de 80.000, para un total de alrededor 700.000 euros a repartir entre 31 clubes, 18 deportistas individuales y tres competiciones para esta edición de la temporada 2022/23.
¿De dónde viene el conflicto?
Y todo, por una serie de desavenencias entre el consistorio castellonense por situaciones que vienen de años atrás. La primera de ellas se produjo en junio del 2015 cuando el Ayuntamiento canceló la inauguración oficial del Torneo Nacional Pamesa Liga Promises de fútbol base se iba a celebrar en la plaza Major de Castelló. La última, la prohibición del concejal de Deportes, Omar Braina, para que las oficinas del Amics del Bàsquet en el Polideportivo Ciutat de Castelló fueran utilizadas como punto de recogida y venta de los abonos del Villarreal el pasado verano. Y, entre medias de esos ocho años, una falta de relación absoluta entre ambas partes.