La Fiscalía Anticorrupción está convencida de que numerosas entidades de crédito, a través de su actividad de banca privada, ayudan a los clientes a defraudar a Hacienda a través de productos fiduciarios y ha denunciado que en ocasiones llegan a "obstruir la acción de la justicia".

Así consta en la memoria de ese organismo, en la que se afirma que las entidades usan como "instrumento de evasión fiscal" los "productos fiduciarios offshore", en los que aparecen "una combinación de testaferros y paraísos fiscales" para ocultar la identidad del titular de los fondos.

Estos productos financieros offshore son cuentas que las filiales en paraísos fiscales de las entidades de crédito españolas tienen abiertas a su nombre en la matriz, en España, y en las que se deposita el dinero de inversores españoles pero sin dar su titularidad alegando que son clientes de las filiales. Para la fiscalía, es "inaceptable" que una entidad se niegue a facilitar la identidad de clientes que residen, han sido captados y han adquirido productos con recursos en España, y que, además, el banco "facilite" los "testaferros".

Estos depósitos integran, según la fiscalía, "capitales formados con rentas que han escapado al control fiscal, susceptibles, por la ocultación de su origen, de ser generadas en actividades delictivas".

EMISIONES IRREGULARES

Anticorrupción también tacha de "irregulares y lesivas para el Tesoro Público" las emisiones de participaciones preferentes --similares a las acciones-- que numerosas entidades de crédito diseñan desde paraísos fiscales y que en los últimos cinco años han ascendido a 15.104 millones de euros (dos billones y medio de pesetas). Ante esta situación, el organismo dirigido por Carlos Jiménez Villarejo pide al Gobierno que promueva la coordinación de los organismos competentes en la lucha contra el blanqueo de capitales.